Críticos del país, cautelosos de la economía, confiando lentamente más en las empresas y publicidad, más sensibles al precio e igual de felices que el año pasado, son algunos de los resultados revelados por la investigación anual Chilescopio, que esta mañana presentó la Visión Humana.
Existe una actitud crítica respecto al funcionamiento del país, ya que sólo un 42 por ciento declara estar satisfecho o muy satisfecho contrario al 60 por ciento que dijo estarlo el año pasado. Aunque esto no ha afectado el nivel de felicidad de los chilenos, ya que un 65 por ciento se declara feliz o muy feliz en su vida personal.
"Lo que más llama la atención, y que resulta un poquito paradójico, es que se instala con mucha fuerza la crítica al país. Sin embargo, se aprecia leve mejora en el plano del bienestar privado. Y eso es bastante paradójico, porque uno podría decir, bueno, aumenta la crítica al país debiese traducirse en una baja en el bienestar personal. Sin embargo, todavía ese fenómeno no se produce", dijo a Cooperativa el director general de la consultora Visión Humana, Patricio Polizzi.
"Todavía no se ha producido esta correlación y eso es interesante. La gente como que opera desdobladamente, criticando al país pero todavía en el mundo privado sintiéndose un poquito mejor, por lo menos respecto al 2012", complementó.
Los ideales o aspiraciones siguen concentrándose, en orden de prioridad, en los ideales de salud, familia, tranquilidad, amor, honestidad, libertad, logro de objetivos, seguridad, armonía interior y justicia. "Los ideales del chileno de hoy son una mezcla de deseos de estabilidad, autoderminación individual e igualdad racional", subrayó Polizzi.
Un consumidor más reflexivo
La opinión sobre el buen estado de salud mental mejora respecto del año pasado. Por otro lado, el vínculo con la cultura sigue siendo un tema pendiente para la mayoría de los chilenos: sólo un 40 por ciento declara interés personal por temas relacionados con el arte y la cultura.
En cuanto al comportamiento de compra, la confianza hacia las empresas, las marcas y la publicidad sigue siendo baja: un 25 por ciento, aunque se podría vaticinar una recuperación paulatina del prestigio social de la publicidad.
Para Polizzi, lo que se puede proyectar respecto al consumo futuro de los chilenos es que habrá un "consumidor más suspicaz, primer factor. Segundo un consumidor más reflexivo o que quiere sentirse más reflexivo en la toma de decisiones, que no quiere sentirse tomando decisiones irracionales o a lo loco, por lo tanto las estrategias tienen que ser menos seductivas, porque la gente las va a rechazar".
"También habrá un consumidor mucho más conciente de los efectos que su consumo pueda tener para el entorno, el medioambiente. No es que haya una conciencia ecológica, sino que la gente siente que lo que ocurre allá afuera se me va a devolver y te diría habrá expectativas hacia las empresas de vínculos más relacionales. Si tu analizas los atributos que la gente valora de una marca fundamentalmente la figura es la de una buena persona, una marca buena persona".
La televisión sigue dominando los medios de comunicación, ya que un 88 por ciento declara exponerse a ésta todos o la mayoría de los días. Le sigue la radio con un 63 por ciento de las preferencias e internet con un 54 por ciento. En tanto, en orden de importancia, las redes sociales favoritas de los chilenos son Facebook, whatsapp, Youtube, Google+, Twitter e Instagram.
La investigación Chilescopio se llevó a cabo entre junio y julio pasado con encuestas presenciales a 1.880 personas de entre 15 a 80 años, en sus respectivos hogares.
