Los hechos más notorios de ataques han sido protagonizados por el pastor evangélico Javier Soto.
El presidente de la instancia, Luis Larraín, solicitó protección policial y rondas periódicas en el domicilio de la fundación.
Anteriormente el pastor Javier Soto persiguió a Luis Larraín en pleno centro de Santiago.
El presidente de la Fundación Iguales, Luis Larraín, presentó este miércoles en la Fiscalía de Ñuñoa una denuncia contra todos quienes resulten responsables de una serie de episodios de hostigamiento contra la institución que encabeza.
Las víctimas de estas situaciones han sido el dirigente y otros miembros de la fundación, quienes aseguran que el hostigamiento viene por parte de representantes de la iglesia evangélica.
"Vinimos a presentar una denuncia contra quienes resulten responsables por el delito de amenazas con el fin de que se investigue y en el caso de que se establezca culpabilidad que se apliquen las sanciones correspondientes. Pedimos también medidas de protección para nuestro equipo ya que este hostigamiento ha sido recurrente por lo tanto tememos por la integridad y seguridad mía y de nuestro equipo", detalló Larraín.
Tres de los incidentes denunciados se tratan de momentos de acoso por parte del pastor Javier Soto: cuando Larraín daba una entrevista en vivo en la votación del AVP (acuerdo de vida en pareja) en el Senado, la discutida persecución en la Plaza de Armas y el altercado en la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados que incluyó forcejeos con autoridades.
Además el pastor evangélico ha utilizado afiches que ha puesto en la puerta de la organización y ha mandado correos electrónicos de hostigamiento recibidos por la fundación.
"Quiero dejar claro que no estamos poniendo a todas la iglesias evangélicas en el mismo saco: de hecho el obispo Soto salió a repudiar los actos cometidos por el pastor Soto, por lo tanto esto en ningún caso se trata de algún tipo de pugna en contra de algún tipo de iglesia", aclaró Larraín.
Molestia en la Iglesia Evangélica con Soto
En tanto, el presidente de la mesa ampliada de Iglesias Evangélicas, Emiliano Soto, dijo no compartir las manifestaciones de violencia, asegurando que el pastor Soto no representa a la Iglesia Evangélica.
"Hay una molestia al interior de la iglesia, bajo varias representaciones. Lo que hemos investigado es que él (Javier Soto) no tiene ninguna entidad religiosa o corporación religiosa que lo respalde, que lo avale, no está sujeto a ninguna entidad legalmente constituida en Chile", enfatizó.
