Julio fue el mes más caliente jamás registrado
La temperatura media global fue 1,2 grados más alta que en la era preindustrial, y se batieron récords en varios países.
"Nos estamos quedando sin tiempo", advierte Greenpeace.
La temperatura media global fue 1,2 grados más alta que en la era preindustrial, y se batieron récords en varios países.
"Nos estamos quedando sin tiempo", advierte Greenpeace.
Julio de 2019 fue el mes con la temperatura media mundial más alta jamás registrada.
Así lo informó el Servicio de Cambio Climático de la agencia europea Copernicus, consignó el diario español El País, que explica que superó por 0,04 grados centígrados a julio de 2016, hasta ahora el mes más caliente de la historia medida.
En julio último la temperatura media del planeta estuvo ya en 1,2 grados por encima del nivel preindustrial, y si se toma como referencia el periodo comprendido entre 1981 y 2010, el incremento en julio fue de 0,56 grados.
A la vez, "2019 no para de encadenar récords de temperatura", resalta el medio... El dato de julio se suma al del mes previo: junio de 2019 fue el junio más cálido desde que hay registros fiables, en el año 1880.
Durante los últimos dos meses se sucedieron en el mundo olas de calor, acelerando el deshielo de glaciares y batiendo récords en Europa, al punto que varios países se vieron obligados a interrumpir servicios de transporte -como ferrocarriles- por problemas derivados del calor en las vías.
El País subraya -citando a Copernicus- que todos los meses de 2019 han estado entre los más calurosos desde que existen registros, y está muy cerca de superar a 2016, con la diferencia en que las temperaturas de ese año estuvieron marcadas por el fenómeno de El Niño, lo que no ocurre ahora.
"La tendencia de calentamiento no se limita a julio", advierte Copernicus: "Cuando miramos hacia atrás, a los últimos cuatro años (entre 2015 y 2018), se descubre que han sido los cuatro años más calientes del registro", señala el servicio.
"Nos estamos quedando sin tiempo", dijo Mario Rodríguez, responsable de Greenpeace en España: "Nos queda una década", dijo, aludiendo al último informe de IPCC —el grupo científico de referencia de la ONU en materia de cambio climático—, en el que se pedía un cambió de rumbo radical de aquí a 2030.
En concreto, los expertos señalan que si se quiere cumplir la meta de evitar un alza de 1,5 grados en la temperatura global -como establece el Acuerdo de París- se requiere una disminución, en 2030, del 45 por ciento de las emisiones de dióxido de carbono respecto al nivel de 2010.
En 2050, esas emisiones deben haber desaparecido.