La contaminación atmosférica causa unos 7 millones de muertes en todo el mundo, según datos de sociedades médico-científicas y de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Con motivo de la Cumbre del Clima (COP25), que tendrá lugar en Madrid del 2 al 13 de diciembre, EFE entrevistó a responsables de sociedades médicas para conocer el impacto de la contaminación en la salud.
Según la Agencia Europea de Medio Ambiente, existe una estrecha relación entre el cambio climático y la calidad del aire.
En muchas regiones del mundo se prevé que el cambio climático afectará, entre otras, a la frecuencia de las olas de calor y los episodios de aire estancado. Esto, además de prolongar los períodos de tiempo en que suben los niveles de ozono, podría agravar aún más las concentraciones máximas de este gas.
La OMS estima que 9 de cada 10 personas en el mundo respiran aire contaminado y cerca de 7 millones de personas mueren cada año por la exposición a las partículas finas contenidas en el mismo.
De acuerdo con sus informes, la contaminación del aire causa el 24 por ciento de todas las muertes de adultos por cardiopatías, el 25 por ciento de las muertes por accidentes cerebrovasculares, el 43 por ciento de los fallecimientos por enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y el 29 por ciento de las muertes por cáncer de pulmón.
Uno de cada cuatro fallecidos tiene menos de 5 años de edad
Según datos del informe de la OMS "¡No contamines mi futuro! El impacto de los factores medioambientales en la salud infantil (2017)", más de una cuarta parte -1,7 millones- de las defunciones de niños menores de 5 años son consecuencia de la contaminación ambiental. De estas, 570.000 son consecuencia de infecciones respiratorias -entre ellas las neumonías-.
La doctora Isabel Urrutia, neumóloga y coordinadora del Área de Enfermedades Respiratorias Ocupacionales y Medioambientales de SEPAR, señala que la contaminación "afecta a los pacientes que tienen una enfermedad respiratoria crónica -sobre todo asmáticos y pacientes con EPOC- y aumenta las posibilidades de desarrollar asma, sobre todo en niños. La contaminación del aire supone más del 50por ciento de los casos de neumonía infantil".
"Vivir en contacto continuo con altos niveles de contaminación es equiparable a fumar entre 5 y 10 cigarrillos diarios", apunta el doctor Carlos A. Jiménez-Ruiz, presidente de SEPAR.
El investigador Xavier Basañaga, del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), ha afirmado a EFE que "cada vez se conocen más efectos de la contaminación en la salud; no solo influye en enfermedades respiratorias o cardiovasculares, también afecta al cerebro y al aparato reproductor".
En cuanto a los efectos en los niños, según un estudio liderado por ISGlobal, el 33 por ciento de los nuevos casos de asma infantil en Europa son atribuibles a la contaminación atmosférica.
Con respecto a los efectos de la contaminación a nivel cardiovascular, el doctor Jordi Bañeras, miembro de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) y la Fundación Española del Corazón (FEC), señala que "el sistema circulatorio es el que más sufre los daños de la contaminación, ya que los contaminantes viajan por el torrente sanguíneo y acaban produciendo enfermedades tanto a nivel cerebral como cardíaco".
"A nivel mundial, el 40 por ciento de los efectos de la contaminación en la salud implican al corazón, mientras a nivel respiratorio, solo un 6 por ciento de las infecciones están asociadas a esta causa", añade.
La relación con el cáncer
En cuanto a su relación con el cáncer, la doctora Aitana Calvo, secretaria científica de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), señala que la contaminación es considerada desde 2013 un agente carcinógeno por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la OMS (IARC, por sus siglas en inglés).
"A nivel mundial, se producen unas 223.000 muertes relacionadas con el cáncer de pulmón y, aunque la contaminación es uno de los factores de riesgo de menor alcance -1 de cada 10 tumores pulmonares se deben a esta causa, mientras el tabaco es responsable de hasta un 90por ciento de los mismos en hombres y un 80por ciento en mujeres-, la población expuesta es muy amplia", apunta.