Tras defender a su hijo pequeño, que era insultado, Silvana Muñoz fue golpeada y amenazada de muerte por un grupo de mujeres.
El caso fue calificado como "sobrecogedor y alarmante" por Rolando Jiménez.
Silvana Muñoz terminó con graves cortes en el rostro infligidos por sus agresoras.
Respaldada por la Oficina de la Diversidad de la Municipalidad de Coquimboy por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movllh) una mujer llamada Silvana Muñoz presentó este lunes una querella criminal contra dos mujeres que la agredieron verbal y físicamente por defender a su hijo de insultos homofóbicos.
En la acción judicial, patrocinada por el abogado Kenneth Romero, Muñoz relató que los acosos contra su hijo -entonces de siete años- partieron en septiembre del 2015 en el sector de Tierras Blancas, en la comuna de Coquimbo, donde vive desde noviembre del 2013 tras obtener una casa por subsidio en razón de su calidad de familia vulnerable.
Las agresoras -Silvia Soto y su hija, María Silva- insultaron "verbalmente a mi hijo, diciéndole que era 'un maricón', 'un homosexual', 'un maraco que tenía la raja abierta' porque jugaba con niñas y con unos legos", relató la madre.
"Me sentí muy impotente y dañada al ver a mi hijo preguntándome el significado de todo lo que le habían dicho. Me he sentido muy triste al no poder explicar lo que está pasando", recordó la denunciante, que ante los repetidos incidentes, se dirigió a la casa de las agresoras para pedir una explicación.
Debido a ello, María Silva "la golpeó en sus senos, mientras Soto le gritaba: 'Tu hijo es un maraco'", detalló el Movilh en un comunicado.
"Me fui llorando a la casa y sólo le pedí que mi hijo que entendiera que lo amo y que no lo defendí agrediendo verbal o físicamente a las mujeres, porque eso no hace y porque los problemas se resuelven dialogando", explica Silvana Muñoz.
Amenazas de muerte y golpiza
Los episodios continuaron y empeoraron luego de que la mujer los denunciara a Carabineros: "Me amenazaban con que me iba a romper la cabeza con un palo y que me iban a matar", contó Silvana.
Además, otra mujer y sus hijos se sumaron a las burlas contra el pequeño, diciéndole que era "un mariquita, que era un niñita y que había que tener cuidado con él".
El episodio más grave ocurrió el 27 de febrero pasado, cuando las agresoras llegaron hasta almacén donde trabaja Silvana lanzándole agua de una botella y gritándole: "Defiende ahora a tu hijo, maraca... Y agradece que es agua y no ácido".
María Silva "me empezó a agredir tirándome el pelo de la frente de mi cabeza. Su madre, en vez de calmarla, también me agredió, me botó al suelo y ambas empezaron a patearme, a cortarme el rostro hasta que me desmayé", relató la afectada en la querella.
Muñoz explicó que la razón de recurrir a tribunales "es para que la gente se dé cuenta de que no debe tener miedo cuando es agredida, y menos agredido un niño de tan sólo ocho años, menos por la condición (sexual)".
"Aquí se pasó a llevar el derecho de sentir, de amar, entonces, esto es sacar la voz quizás por cuanta gente que se queda callada por miedo, porque es agredida, la amenazan y eso ya no puede ser", sentenció la mujer.
"Crueldad extrema"
El dirigente del Movilh, Rolando Jiménez, calicó de "sobrecogedor y alarmante lo sucedido a Silvana y a su hijo".
"Las responsables de estos abusos merecen todo el peso de la ley. Ellas han violado los derechos humanos de una madre y, más impactante aún, de un niño. Insisto, de un niño. Es una crueldad extrema, de nula sensibilidad".
"Llevo casi 25 años conociendo denuncias por discriminación y este caso es uno de los brutales que he visto. Esperamos los tribunales hagan su trabajo, pues Silvana y su hijo están en total desprotección ya que siguen siendo acosados", señaló el líder histórico del Movimiento.
En tanto, el abogado Romero precisó que en la querella se pidieron variadas diligencias, como la citación de las querelladas y de los testigos, con el fin de comprobar los delitos de agresiones y amenazas, con el agravante de estar motivados por la discriminación en razón de la orientación sexual.
El representante de la Oficina de la Diversidad de Coquimbo, Felipe Cerda, y la dirigente de la Igualdad Plena, Salomé Caimanque, expresaron, por su lado, toda la solidaridad a Silvana y lamentaron los hechos que la afectan.
