Un estudio de la revista The Lancet reveló que las tasas de cáncer cervical en Inglaterra se redujeron en un 87 por ciento en mujeres vacunadas contra el virus del papiloma humano (VPH), conclusiones obtenidas gracias al programa de inmunización con la fórmula bivalente Cervarix iniciado en 2008.
La investigación halló que las tasas de cáncer cervical en mujeres inoculadas entre las edades de 12 y 13 años eran un 87 por ciento menores que en población no inmunizada, y es la primera evidencia directa de prevención de cáncer de cuello uterino que utiliza una vacuna bivalente en todo el mundo.
El estudio estimó que, para junio de 2019, había alrededor de 450 casos menos de este tipo de cáncer y 17.200 menos de carcinomas que los esperados en la población vacunada en Inglaterra.
Los investigadores también encontraron una reducción del cáncer cervical del 62 por ciento en mujeres que se aplicaron la vacuna cuando tenían entre 14 y 16 años, y de un 34 por ciento en mujeres que tenían entre 16 y 18 años cuando se administró la vacuna.
La vacunación contra el VPH se introdujo en 100 países como parte de los esfuerzos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de eliminar ese tipo de cáncer.
En Inglaterra se emplea principalmente la vacuna bivalente, que protege frente a los dos tipos más comunes de VPH, responsables de aproximadamente entre el 70 y el 80 por ciento de todos los cánceres cervicales.
"Aunque estudios previos han mostrado la utilidad de la vacunación contra el VPH a la hora de prevenir la infección por VPH en Inglaterra, la evidencia directa de prevención en cáncer de cuello de útero era limitada", indicó Peter Sasieni, uno de los autores del estudio, del King's College de Londres.
El experto señaló que si bien estudios anteriores sugerían que el impacto del programa de vacunación en tasas de cáncer de cuello de útero sería "sustancial" en mujeres de edades entre 20 y 29 años para finales de 2019, "el impacto observado es incluso mayor que lo que preveían los modelos".
Kate Soldan, de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido, indicó que el citado estudio "representa un importante paso hacia adelante en la prevención del cáncer de cuello de útero".