Un avión de Aerolíneas Argentinas partió este martes a China en busca de las primeras dosis que el país sudamericano recibirá, el próximo jueves, de la vacuna producida por el laboratorio chino Sinopharm, con la que se iniciará la inoculación al personal docente, confirmaron fuentes oficiales.
En ese envío se transportarán 904.000 dosis, mientras que en otro vuelo, en los próximos días, llegarán 96.000 dosis más, hasta completar el millón adquirido por el Gobierno de Alberto Fernández.
El presidente de la aerolínea, Pablo Ceriani, detalló que para el traslado de las vacunas, que requieren de una refrigeración entre 2 y 8 grados centígrados, se utilizarán "envirotainers", que son contenedores especiales con control activo de temperatura que permite trasladar un mayor volumen de vacunas en el avión.
En total, serán 48 horas de operación con una escala en Madrid, más el tiempo de carga en el aeropuerto internacional de Pekín, y se estima que el vuelo aterrice de nuevo en Buenos Aires el jueves por la noche.
VACUNAS DE RUSIA, INDIA Y CHINA
Este lote llegado de China se sumará a las remesas ya recibidas por Argentina de finales de diciembre: 1,22 millones de dosis de la Sputnik V y 580.000 del Instituto Serum de la India, realizada con la tecnología de la británica AstraZeneca.
Por el momento sólo se ha habilitado la vacunación de personal sanitario y adultos mayores -en el caso de Buenos Aires mayores de 80 años-, con turno tramitado por internet y asignado en función de la disponibilidad de dosis.
Este martes, la nueva ministra de Salud, Carla Vizzotti, anunció en la reunión del Consejo Federal de Salud, ante todos los titulares provinciales de Salud, que con el arribo de la vacuna desarrollada por Sinopharm comenzará la inoculación al personal docente de todo el país.
Ya el domingo pasado, Vizzotti autorizó "con carácter de emergencia" el uso de la vacuna contra el covid-19 desarrollada por Sinopharm, y se anunció la llegada del primer millón de dosis en los próximos días.
La ministra tomó la decisión a recomendación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat), que aconsejó el uso de la vacuna china hasta los 60 años.
La adquisición se da en el contexto del acuerdo comercial que gestionó el Gobierno de Alberto Fernández con la Corporación Grupo Farmacéutico Nacional Chino, informó la Presidencia argentina.
Según la información difundida, la vacuna contra el SARS-COV-2 desarrollada por Sinopharm en colaboración con el Laboratorio Beijing Institute of Biological Products de China es una vacuna "inactivada", lo que significa que porta una versión del virus alterada genéticamente que le impide reproducirse y desarrollar la enfermedad, pero que genera una "respuesta inmune en el organismo con capacidad protectora".
La vacuna requiere de dos dosis que se han de aplicar con al menos 21 días de diferencia.
Hasta ahora, además de la vacuna de Sinopharm, Argentina ha autorizado el uso de las de la estadounidense Pfizer -con la que el Gobierno no llegó a un acuerdo para su compra-; la rusa Sputnik V; la elaborada por AstraZeneca y la producida en el Instituto Serum de la India.