Tras años después del primer fallecimiento por Covid-19 en Chile, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, y la directora nacional subrogante del Instituto Nacional de Estadísticas, Daniela Moraga, junto a sus equipos técnicos, presentaron este lunes un informe con los datos consolidados de las cifras de fallecidos por la pandemia en 2020.
Inicialmente, los datos que entregaron las antiguas autoridades sanitarias sobre la cantidad de personas fallecidas por el coronavirus el primer año de la crisis ascendía a 22.000; sin embargo, luego de la investigación del Minsal, se informó hoy finalmente de 18.680 muertes.
Aguilera explicó que el difícil contexto que vivía el ministerio el año 2020 debido a la pandemia explicaría, en parte la diferencia: "Había una gran dificultad en dar a conocer efectivamente cuáles eran las cifras por la cuantía de la información, por la exigencia de este paradigma respecto a tener notificado caso a caso en una situación de una epidemia de esta masividad, y también el tema de las defunciones. Esta situación no es ajena a las otras epidemias que hemos vivido y tampoco a lo que se vivió en otros países. La controversia respecto a las cifras ocurrió en distintos países".
Acorde al documento consolidado, en 2020 se produjeron más de 126.000 defunciones a nivel nacional, de las cuales el 14,8% fue causado por el Covid.
El grupo de mayor mortalidad por el virus según género fue el de las mujeres entre 85 y 89 años y los hombres entre 75 a 79, mientras que por cada 100 muertes de mujeres hubo 136 hombres fallecidos.
El informe constató, además, que el coronavirus redujo la esperanza de vida de los chilenos en 1,5 años en los hombres y 0,9 en las mujeres.
La directora (s) del INE señaló que ha sido "necesario ejecutar procesos acuciosos de revisión, clasificación, codificación, análisis y evaluación de los datos para poder cumplir con la misión de entregar estadísticas con carácter final y oficial".
"De esta forma, los datos provisionales nos entregan información general lo más cercano al año informado, mientras que las estadísticas oficiales tardan más tiempo en ser publicadas, debido a la cantidad de procesos de aseguramiento de calidad a las que deben ser sometidas", añadió Moraga.
El ministro de Salud de ese entonces, Jaime Mañalich, explicó el criterio usado de ese entonces para contar a los fallecidos. "No todas las personas que fallecen tienen un examen de Covid hecho, entonces nosotros dijimos que, para mantener un buen control de la pandemia, aunque las personas no se hayan hecho exámenes y haya una posibilidad que la enfermedad que los hizo fallecer era otra. Digamos que toda persona que falleció por una afección respiratoria, asignémoslas como Covid en el ánimo de llevar un cuidado y una acuosidad muy estricta".
Tras la publicación del informe de 2020, queda pendiente la consolidación de las cifras de 2021 y 2022.