Estados Unidos se aproxima a los 5 millones de casos de Covid-19, con más de 161.000 fallecidos, mientras que el presidente Donald Trump sopesa firmar de forma unilateral varias órdenes ejecutivas para estimular la economía, tras el colapso de las negociaciones con los demócratas.
Según los datos de la Universidad Johns Hopkins, EE.UU., el país más afectado por la pandemia, registra hasta esta jornada un total de 4.968.413 contagios confirmados y 161.858 muertos.
Los estados con más casos son California, con 549.720; Florida, con 526.577; y Texas, con 491.452.
Respecto a los decesos, el estado que ha sufrido más fallecimientos por coronavirus es Nueva York, con 32.768; seguido de Nueva Jersey, con 15.869; y California, con 10.221.
La pandemia avanza mientras destruye la economía
La crisis sanitaria ha causado un grave deterioro de la economía del país, que se hundió a un ritmo anual del 32,9 por ciento en el segundo trimestre de 2020 y cayó el 9,5 por ciento frente a los tres primeros meses del año, los mayores descensos de este indicador desde que se tienen registros.
El Departamento de Trabajo informó el viernes que la recuperación del mercado laboral se moderó en julio con la disminución del índice de desempleo del 11,1 por ciento el mes previo al 10,2 por ciento, mientras que se generaron 1,8 millones de puestos de trabajo.
La modesta mejoría refleja la gradual reapertura de la economía, golpeada por la pandemia, aunque 16,3 millones de estadounidenses siguen sin empleo.
Ante el descalabro económico, los demócratas y la Casa Blanca llevaron a cabo entre el jueves y el viernes una nueva ronda de negociaciones para impulsar un nuevo paquete de estímulo económico, que por el momento no han llegado a buen puerto.
Demócratas y la Casa Blanca no se ponen de acuerdo
Los progresistas ofrecieron el jueves rebajar su petición un billón de dólares para que el paquete de rescate sea de 2,4 billones, pero pusieron como condición que la Casa Blanca incremente su oferta de un gasto total de un billón de dólares a los 2 billones.
Sin embargo, los negociadores de la Casa Blanca, el secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, y el jefe de gabinete, Mark Meadows, han calificado de "imposible" la propuesta demócrata.
En parte, el gobierno se resiste a aumentar el gasto porque está recibiendo presión de una minoría de legisladores republicanos, favorables a la disciplina fiscal y que por motivos ideológicos consideran que el Gobierno federal no debe interferir en el libre mercado.