Sondeo gubernamental reveló que un 62% de las firmas prevé desvinculaciones en los próximos meses y más de la mitad dice estar al borde la quiebra.
El avance del Covid-19 ha puesto al turismo chileno -un sector que ya se encontraba debilitado por las protestas sociales que surgieron en octubre del año pasado- ante la que tanto empresarios como autoridades han calificado como la "peor crisis en su historia", lo que ha llevado a a los gerentes de distintas firmas a tomar medidas como el despido de trabajadores o cierres temporales.
De acuerdo a un sondeo realizado por la Subsecretaría de Turismo -dependiente del Ministerio de Economía-, junto a Sernatur y la encuestadora Cadem, un 45 por ciento de las empresas no está operando, 22,4 puntos porcentuales más que en la medición que se hizo la última semana de marzo.
Por su parte, sólo un 7 por ciento indicó que está funcionando al 100 por ciento, muy por debajo del 14,5 por ciento que había sostenido lo mismo en la encuesta anterior, según consigna este jueves el diario La Tercera.
El 80 por ciento de las empresas que participaron del estudio afirmó que su situación económica es muy mala o mala y un 79 por ciento, que las cancelaciones que han tenido las últimas semanas han sido del orden de un 90 y 100 por ciento de lo que se tenían reservado.
Según la encuesta, los principales perjudicados de esta crisis son las empresas de alojamiento turístico (66 por ciento), seguido por las del rubro gastronomía/restaurantes (28 por ciento) y turoperadores (27 por ciento).
Siempre en este contexto, cuatro de cada 10 señala que su empresa ya ha despedido trabajadores a causa de la crisis sanitaria por el coronavirus, mientras que un 62 por ciento admitió que deberá desvincular trabajadores en los próximos meses.
En lo que respecta a la liquidez, un tercio de las empresas turísticas reconoció que ya no tiene caja para sostener la situación actual, mientras que 60 por ciento solo tiene fondos para los próximos tres meses.
Producto de lo anterior, un 55 por ciento señaló que es muy o bastante probable que su empresa enfrente una quiebra o cierre de giro, mientras que un 25 por ciento respondió que es algo probable y un 15 por ciento, que es poco o nada probable.
Consultas por el tiempo que tardarán las empresas en retomar una situación de normalidad en actividad y ventas, el 39 por ciento proyecta un periodo de seis meses y el 34 por ciento, un año. El 11 por ciento cree que tardará tres meses, el 7 por ciento indicó que tomará dos años y el 5 por ciento considera que no se recuperará y tendrá que cerrar.
Respecto a las medidas ya adoptadas por las empresas en el marco de la crisis, en respuestas múltiples, el 60 por ciento reveló haber cerrado instalaciones, el 47 por ciento dijo haber frenado decisiones de inversión, el 21 por ciento señaló que redujo salarios, y el 17 por ciento hizo referencia a créditos bancarios.
Por otra parte, 63 por ciento aseguró conocer el plan económico del Gobierno para enfrentar la crisis del coronavirus.
Las medidas gubernamentales más valoradas por los encuestados fueron la postergación del pago de IVA por los próximos tres meses (47 por ciento), la postergación hasta julio del pagos de impuestos a la renta en las pymes (41 por ciento) y la suspensión de pago de los PPM (41 por ciento).
PÉRDIDAS BILLONARIAS
Cabe recordar que la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur) ha proyectado una disminución de 2,6 millones de turistas extranjeros en el país durante 2020 debido a la pandemia, lo que ocasionará unas perdidas de 3.900 millones de dólares.
El 97 por ciento de las empresas turísticas son micro y pequeñas empresas. El turismo en Chile genera cerca de 400.000 empleos y aporta un 3,3 por ciento al Producto Interno Bruto del país.
Según Fedetur, producto del estallido social, se perdieron 40.000 empleos, a los que se sumarían 80.000 puestos más debido a la contingencia del coronavirus.
La crisis que afecta al turismo va de la mano con el cierre de las fronteras chilenas y la disminución de operaciones de las aerolíneas locales y extranjeras.
La principal línea aérea de Latinoamérica, Latam Airlines, redujo sus operaciones en un 70 por ciento y no descartó reducciones adicionales en el futuro. En tanto, la low cost Sky Airline, suspendió todos sus vuelos hasta el próximo 30 de abril. JetSmart, por su parte, redujo las operaciones en el país en un 88 por ciento.
La industria mundial de las aerolíneas acusa una crisis que podría derivar en la quiebra de las compañías de no recibir ayuda de parte de las autoridades.
