Los españoles podrán estar al aire libre sin mascarillas desde el próximo sábado, aunque tendrán que usarla si no se puede mantener la distancia de seguridad, y también en el interior de recintos cerrados, según aprobó este jueves el gobierno.
La ministra de salud, Carolina Darias, justificó la medida por el avance de la vacunación y por la recomendación de los expertos. "Una medida que nos acerca a la normalidad, con prudencia", dijo hoy.
No obstante, las personas tendrán que llevarla a mano, ya que sigue siendo obligatorio su uso en el transporte público, en lugares cerrados y en el exterior, si hay aglomeraciones y no se puede guardar una distancia de 1,5 metros.
Por otra parte, los estadios volverán a la normalidad al comienzo de la liga de fútbol y de la ACB de baloncesto y podrán recibir la misma afluencia de público que tenían antes de la pandemia, según anunció Darias, aunque con mascarillas si no se puede mantener la distancia en el exterior o si es en el interior.
Además, se aspira a flexibilizar las limitaciones vigentes en el acceso a edificios de los aeropuertos, hasta ahora solo permitido a personas con billete, personal trabajador, fuerzas y cuerpos de seguridad y trabajadores de inspección.
España tiene en estos momentos una incidencia acumulada de 92 casos por cada 100.000 habitantes, una cifra que no se movió en los últimos días.
Y respecto a la vacunación, alcanzó ya a la mitad de la población vacunada con al menos una dosis y se han superado los 15 millones de inmunizados con la pauta completa.