La familia de Beatriz Núñez, bombera de Romeral que fue encontrada sin vida el pasado sábado tras desaparecer en las aguas del río Teno, aún no retira el cuerpo de la mujer desde el SML, porque aseguran que no murió de Covid-19, pese a que la autopsia arrojó positivo para la enfermedad tras su muerte.
Certificado en mano, aseguran que la fallecida voluntaria fue dada de alta el 19 de noviembre tras la cuarentena y se niegan a realizar un funeral protocolar por coronavirus, fundamentando que no fue la causa de la muerte y porque quieren despedirla con honores institucionales.
"Ella murió por el agua y contusiones, no por Covid-19, y eso nos tiene angustiados. El protocolo no nos deja darle un homenaje y cristiana sepultarla, porque era bombera y la institución quiere despedir a una de las suyas", dijo el padre de la mujer, Eusebio Núñez.
Beatriz Bustamante, la madre, agregó que "mi hija estaba de alta, no falleció de Covid, tuvo un accidente. Lleva una semana en el SML y hemos golpeado puertas, pero nadie nos escucha".
La hermana de Beatriz, Tamara Núñez, manifestó que "nosotros lo que pedimos es hacer un funeral que dure más de 90 minutos, a lo menos cuatro horas para poder hacer una linda despedida, como es lo que nosotros queremos".
El SLM, entregó un comunicado de prensa donde establecieron que "que se ha dado cumplimiento cabal a la normativa vigente que guía los procedimientos periciales tanatológicos bajo las actuales circunstancias de emergencia sanitaria" y desde la Seremi de Salud, advirtieron que no pueden pronunciarse ante la ficha médica de una persona.