El Ministerio del Interior presentó una segunda querella por incumplimiento de cuarentena, en esta oportunidad contra un hombre de 33 años en la Región del Ñuble.
Fue a trabajar el 19 de marzo en la obra del nuevo Centro de Justicia de Chillán, pese a encontrarse notificado por el Departamento de Salud de San Carlos de su deber de permanecer en cuarentena por ser caso sospechoso de coronavirus.
Según la acción legal, el jefe de la faena en la que trabaja el querellado señaló que se presentó a trabajar en horas de la mañana y que se retiró cerca de las 15:30 horas presentando un certificado médico.
La querella invoca el Artículo 318 del Código Penal, que indica que el que pusiera en peligro la salud pública por infracción de las reglas higiénicas o de salubridad en tiempo de catástrofe será penado con presidio en su grado mínimo o con una multa, que podría llegar al millón de pesos.
Carabineros detuvo al sujeto por incumplir el mandato sanitario tras salir de su domicilio en San Carlos y presentarse en su trabajo en Chillán.
Fue puesto a disposición de la Fiscalía, que dispuso su libertad a la espera de una citación a la espera del término de su aislamiento.
La primera querella presentada por el Gobierno por incumplimiento de cuarentena fue contra Tomás León Marinkovic, que viajó en avión de Santiago a Temuco sin esperar el resultado del test por Covid-19, que resultó positivo.