Un grupo de unos 50 ciudadanos de nacionalidad venezolana pernoctan por segunda noche consecutiva fuera del consulado de Venezuela en Santiago reclamando ayuda para regresar a su país en medio de la emergencia sanitaria del Covid-19.
Aglomerados frente a la legación diplomática ubicada en calle Bueras, en la comuna de Providencia, siguen llegando venezolanos a este improvisado campamento en el que también hay embarazadas, ancianos y niños que pasan a la intemperie las frías madrugadas del otoño.
El regreso a su país por cuenta propia es inviable para este grupo de personas, especialmente tras la crisis sanitaria provocada por el nuevo coronavirus, que ha agudizado sus condiciones de vida y ha dejado a algunos sin trabajo y sin poder mantenerse.
Henry Ramírez, uno de los integrantes del grupo, relató a Cooperativa que lo que están buscando "no es plata, lo que queremos es irnos, porque estamos en situación de calle".
"Nos quedamos sin trabajo, nos botaron y lo que nos dieron ya se nos acabó. Esperamos, en el nombre del Señor, que el gobierno (de Nicolás Maduro) nos dé una respuesta", señaló.