La Fiscalía Regional de O'Higgins confirmó la apertura de una investigación penal en contra de los dos fiscales del Ministerio Público y los funcionarios de Carabineros que participaron en la detención de una mujer que en horario de toque de queda salió para denunciar una violación en Pichilemu.
De forma paralela, a nivel administrativo también se abrió una indagatoria para determinar eventuales responsabilidades de finalmente insistir en pasar al control de detención a la mujer que denunció haber sido víctima de un delito sexual.
Carina Valdés, abogada vocera de la Fiscalía Regional de O'Higgins, indicó que "habiéndose recabado los antecedentes y los informes solicitados a los fiscales involucrados en el procedimiento policial ocurrido en la comuna de Pichilemu, la Fiscalía Regional, ante la gravedad de los hechos, ha adoptado la decisión de dar inicio a investigaciones tanto penales y administrativas respecto de fiscales y funcionarios policiales en dicho procedimiento".
El hecho denunciado por la Defensoría Regional de O'Higgins da cuenta que la madrugada del 5 de julio, la víctima salió a la calle para pedir ayuda tras haber sido presuntamente ultrajada sexualmente.
En ese momento, y tras el llamado de una vecina, la mujer, que según Carabineros estaba ebria, fue detenida por infringir el toque de queda, cuestión que a pesar de que a posteriori en el hospital revelara lo que le había pasado, la Fiscalía insistió en que ella pasara a control de detención por infringir el artículo 318.
Su detención, a juicio del tribunal, fue declarada ilegal.