El Hotel Chillán Sur se convirtió en la tercera residencia sanitaria en Ñuble para pacientes con Covid-19 que no pueden realizar la cuarentena obligatoria en sus hogares, ya sea por espacio o requerimiento de cuidados necesarios.
De esta forma se suma al Hotel Quinchamalí y el Hotel Rukalaf, que entraron en funcionamiento durante las últimas semanas, donde actualmente se encuentran confinados 106 ñublensinos.
Marta Bravo, seremi de Salud de Ñuble, señaló que "esta estrategia busca la contención del virus, aislando en forma efectiva a las personas que podrían seguir propagando la pandemia, a través de un confinamiento gratuito, con alimentación y monitoreo permanente de su estado de salud".
Se trata de dispositivos para personas contagiadas con coronavirus, asintomáticos o casos leves, que sean autovalentes, con patologías crónicas compensadas y que no puedan realizar su aislamiento en el propio domicilio.
El intendente Martin Arrau agregó que "se mantienen disponibles cerca de 60 cupos, pero estamos ampliando aún más la capacidad, de tal manera que las personas que cumplen con los requisitos puedan ocupar de manera cómoda y segura estos dispositivos".
Las autoridades recorrieron las dependencias de la tercera residencia y confirmaron que prontamente se abrirá un cuarto dispositivo en el Hotel Alicante, donde se dispondrán 41 cupos más.