"La tasa de contagio dentro de las constructoras que han cumplido a cabalidad la norma ha sido bajísima", afirmó el secretario de Estado.
Por su parte, los trabajadores piden tomar todas las medidas sanitarias, pero insisten en seguir con sus labores.
El ministro de Salud, Enrique Paris, señaló que mantener las constructoras como actividad esencial ha sido cuestionado, pero -indicó- que existe un compromiso para mantener estrictas medidas sanitarias en los obras y que en caso de no tenerlas, serán cerradas.
"Hay protocolos muy estrictos para las constructoras, incluso con PCR negativo y con transporte privado. Si eso no se cumple, obviamente que nosotros clausuramos las constructoras que no están cumpliendo con la normativa, creo que es un punto también a revisar", afirmó el secretario de Estado.
En la misma línea detalló que "hemos sido muy estrictos con eso y la tasa de contagio dentro de las constructoras que han cumplido a cabalidad la norma ha sido bajísima. La que no cumpla el protocolo será cerrada".
Por su parte, Antonio Errázuriz, presidente de la Cámara Chilena de la Construcción, se mantuvo firme en la postura de que el rubro debe seguir trabajando durante la cuarentena total que afecta a gran parte del país e incluso evitó referirse a la esencialidad.
"La idea es comprobar en terreno el cumplimiento del protocolo sanitario y dar respaldo a la tasa de contagio que nosotros tenemos, que realmente es de 3 por cada 100 mil trabajadores", aseguró el representante de las constructoras.
"El único plan B que tenemos hoy es seguir trabajando, es ser rigurosos en el cumplimiento del protocolo sanitario y en ese sentido, dentro de todas las medidas, está la movilización privada, exámenes PCR y otras cosas", puntualizó Errázuriz.
El presidente de la Federación del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Construcción, Montaje Industrial y Afines (Sintec Chile), Jorge Hernández, afirmó que necesitan tener todos los protocolos sanitarios en las obras, pero que ellos seguirán trabajando.
"Como trabajadores, estamos disponibles y dispuestos a cuidarnos, la empresa tienen que poner las condiciones y también el Estado las garantías para que podamos estar en un entorno seguro y sano, sobre todo en estos tiempos de pandemia, donde no solamente aqueja la salud, sino que también los puestos de trabajo", advirtió el líder sindical.
Además, señaló que "en la construcción, gracias a este protocolo, hemos podido seguir trabajando tanto en obra públicas como en obras de edificación".
En tanto, la jefa de proyectos de la Mutual de Seguridad, Paula Garrido, aseguró que todas las constructoras deben demostrar que cumplen con los protocolos para su funcionamiento y que, junto a las autoridades, seguirán con la fiscalización (hasta el momento llevan más de 600 obras).
"Ellos nos tienen que demostrar que efectivamente tienen un transporte, que este transporte cumple con las condiciones mínimas para el traslado de los trabajadores y los que se trasladan en su vehículo propio también cuentan con un kit de sanitización", acotó la experta.
Garrido también detalló que en el ingreso de obra también es necesario "la toma de temperatura", y en la hora de almuerzo también existen protocolos "con respecto a las condiciones que se deben dar para ese horario, en el cual la gente efectivamente se retira la mascarilla".
Actualmente se registran 2.810 empresas constructoras inscritas en el protocolo para poder funcionar durante las cuarentenas, que abarca un total de cinco mil cuarenta proyectos y más de 450 mil trabajadores.
