Samsung pretende que todos los aparatos que fabrica, desde teléfonos hasta hornos y aspiradoras, estén conectados a internet y sean "inteligentes" en un plazo de cinco años, anunció el presidente de la empresa surcoreana, Boo-Keun Yoon.
Durante una conferencia en el marco de la feria de electrónica de consumo CES, en Las Vegas (EE.UU.), Boo-Keun afirmó que en 2017 el 90 por ciento de sus productos tendrá conexión a internet y el 10 por ciento restante también será "inteligente" en 2020.
Estas metas se enmarcan en el desarrollo del "internet de las cosas", concepto que plantea conectar a internet desde aparatos domésticos hasta prendas de ropa equipadas con sensores dedicados a monitorizar la salud de la persona que las viste.
Boo-Keun afirmó que el internet de las cosas "ya no es ciencia ficción" sino "un hecho" y sostuvo que supondrá una "revolución" tecnológica y económica.
El responsable de Samsung defendió que la conexión de los aparatos se basa en un sistema operativo "abierto", accesible a terceras empresas para que estas puedan desarrollar sus propias aplicaciones.
Asimismo, presentó un prototipo de conector o "hub" para servir de puente entre los objetos "inteligentes" y el teléfono móvil para controlarlos, así como el desarrollo de sensores con fines variados, como la detección de movimientos o la diferenciación de olores.
Utilidades
La interconexión de objetos puede permitir, por ejemplo, que la calefacción se regule sola en función de si las personas sienten frío o calor en una habitación o que se haga un pedido al supermercado si se acaba algún producto de la nevera, según la presentación de la empresa surcoreana.
Samsung también anunció el lanzamiento de un servicio de suscripción de alertas en Estados Unidos que permitirá, entre otras cosas, avisar automáticamente a una ambulancia si una persona sufre un accidente casero o a los bomberos si se inicia un incendio.
Entre los principales desafíos para el desarrollo del "internet de las cosas", Boo-Keun citó los problemas de seguridad inherentes a la conexión constante de todos los objetos y la necesidad de que la industria se empeñe en colaborar para avanzar en el proyecto.