El gigante tecnológico estadounidense Apple alcanzó este miércoles un nuevo máximo histórico en Wall Street, en medio de la mala racha que atraviesa su rival surcoreano Samsung por los repetidos casos de combustión de su teléfono Galaxy Note 7.
Las acciones de Apple subieron un 0,89 por ciento en el mercado Nasdaq y terminaron la sesión en 117,34 dólares, su segundo récord de cierre histórico consecutivo, después de una jornada en la que llegó a rozar los 118 dólares.
El gigante tecnológico, uno de los treinta valores que forman parte del índice Dow Jones de Industriales, acumula en los últimos cinco días un avance del 3,98 por ciento, mientras que en el último mes sus títulos se han revalorizado un 11,46 por ciento.
La buena racha de Apple en Wall Street coincide con el mal momento que está atravesando Samsung Electronics, que esta semana anunció que dejará de producir su teléfono Galaxy Note 7 por los repetidos casos de combustión del dispositivo.
Precisamente hoy, la compañía admitió que esos problemas le han obligado a recalcular su pronóstico de facturación entre julio y septiembre (la venta del Galaxy Note 7 empezó el 19 de agosto) y rebajó sustancialmente sus previsiones de resultados.
Samsung prevé ahora que sus ventas se sitúen en el tercer trimestre en unos 41.852 millones de dólares, lo que supone un descenso del 4,09 por ciento respecto a lo calculado inicialmente.
Así, mientras Apple cotiza en máximos históricos en Nueva York, los inversores llevan días castigando a Samsung en la bolsa de Seúl, donde solo este martes sus acciones se desplomaron más de un 8 por ciento y hoy cerraron con un retroceso del 0,65 por ciento.