"Tener dos productos que compiten el uno contra el otro en el mismo lugar genera interés, ruido y agitación sobre las oportunidades de optimizar los videojuegos para las televisiones 4K", dijeron.
Microsoft presentó el domingo su nueva consola, la Xbox One X.
Ante el estreno de la Xbox One X por su gran rival Microsoft, Sony cree que la competencia de esta consola con su PlayStation 4 Pro es algo bueno para la industria del videojuego, según explicó a Efe el jefe de ventas globales y marketing de Sony, Jim Ryan.
"Creo que será muy interesante y en muchos sentidos será algo bueno. Tener dos productos que compiten el uno contra el otro en el mismo lugar genera interés, ruido y agitación sobre las oportunidades de optimizar los videojuegos para las televisiones 4K (de alta definición)", dijo Ryan en una entrevista durante la feria E3, que cierra hoy sus puertas en Los Ángeles (EE.UU.).
El ejecutivo añadió que los desarrolladores también se podrían beneficiar de la disputa empresarial entre Xbox y PlayStation si, como consecuencia, resulta más fácil y accesible crear juegos para altas resoluciones.
Microsoft anunció en la E3, el evento más importante en todo el mundo del sector del videojuego, que el 7 de noviembre se pondrá a la venta la Xbox One X, una consola de alta gama con resolución 4K (8 millones de píxeles).
Este dispositivo competirá de manera directa con la PlayStation 4, que ha vendido 60 millones de unidades desde su estreno en 2013, y la versión Pro de esta consola, que llegó a las tiendas el año pasado.
Ryan aseguró que el modelo Pro representa en la actualidad una de cada cinco ventas de la PlayStation 4: "Nos va muy bien y si pudiéramos hacer más venderíamos más, así que la demanda está ahí para nuestro producto".
El responsable de Sony evitó hacer comparaciones con la Xbox One X, ya que no conoce al detalle la consola de su rival, pero sí señaló que la diferencia de precio puede ser un obstáculo para Microsoft en algunos países como España.
"Nosotros tenemos un precio de 399 euros (para la PlayStation 4 Pro) y su precio es de 499 euros (para la Xbox One X). Creo que en el mercado de España, donde PlayStation ha sido muy fuerte durante muchos años, la historia nos cuenta que tener una desventaja de 100 euros respecto a nosotros no será fácil para ellos", opinó.
"Las decisiones para comprar cosas son una unión de muchos factores. Ahí tienes la situación de que hay gente encantada de pagar 800 o 900 euros por un teléfono inteligente. Por supuesto, el precio es importante, pero después es una cuestión de lo que consigues por ese precio", añadió Ryan sobre el equilibrio entre el costo de un dispositivo y lo que obtiene el usuario.
El pasado lunes, Sony organizó en el Auditorio Shrine de Los Angeles su tradicional presentación previa a la E3, en la que desveló adelantos de juegos como "God of War", "Call of Duty WWII" y "Spider-Man".
Ryan confió en que la apariencia visual de estos videojuegos en la PlayStation 4 Pro sea "absolutamente maravillosa", y aseguró que los desarrolladores están empezando a comprender y aprovechar todo "el poder" que despliega esta consola.
Sony también empleó una parte sustancial de su conferencia en mostrar algunos ejemplos de videojuegos de realidad virtual como "The Impatient", "Skyrim" y "Bravo Team".
"Para nosotros era muy importante hacer una declaración de que vamos a continuar desarrollando juegos excitantes para PlayStation VR", apuntó en referencia al modelo de su consola adaptado a la realidad virtual.
Acerca de la lentitud de la industria a la hora de aplicar esta tecnología a los videojuegos, Ryan consideró que los desarrolladores están "aprendiendo" todavía a trabajar con ella y aseguró que va a llevar "un poco de tiempo" hasta que dominen la realidad virtual.
Por último, el ejecutivo de Sony defendió la industria del videojuego como una "forma de entretenimiento legítima y de masas" a la altura del cine o la música.
"Creo que una de las consecuencias de los avances tecnológicos (en los videojuegos) es que la manera en la que se ven los personajes en un juego se está convirtiendo en algo mucho más interesante, más parecido a la vida, con potencial de ser mucho más profundo", argumentó.
"Las posibilidades de hacer cosas diferentes en (el diseño de) personajes o en la narración (de los videojuegos) pienso que potencian nuestra reclamación de ser tomados en serio como una forma de entretenimiento", finalizó.
