Un grupo de científicos replicaron con realismo las conductas de un lactante.
El objetivo es estudiar el progreso humano.
Los científicos japoneses de la Universidad de Asada mostraron su más reciente creación, un robot bebé que es capaz de abrazar a una persona de manera muy realista.
Lo hace con 20 controles neumáticos que replican las actividades del recién nacido: mover los brazos, cuello y columna vertebral. Su cara está cubierta con piel de uretano, que reproduce también expresiones faciales.
De acuerdo a lo informado por el sitio The Verge, el robot se creó para estudiar el progreso humano, investigando las formas de interacción entre los lactantes y sus cuidadores en los países en progreso.
El robot aún no está del todo terminado. La idea es que sea de tamaño natural y que pueda recrear "las mismas condiciones de un niño de verdad".
