Unos 20.000 israelíes se han sumado a una demanda coordinada por una ONG local y presentada en EE.UU. para que la justicia de ese país obligue a Facebook a retirar de su plataforma contenidos que, consideran, "incitan al asesinato de israelíes".
El objetivo es poner fin a ese fenómeno y que el Tribunal sentencie que Facebook "tiene responsabilidad" en lo que se difunde a través de su plataforma, dijo a Efe la abogada Rachel Weisser, de la ONG "Shurat Hadin" o "Centro Legal de Israel", por su nombre en inglés.
La demanda, presentada en nombre de los 20.000 israelíes que han firmado la petición por internet y facilitado materiales, pide a la parte demandada "que deje de permitir a los terroristas palestinos que inciten a ataques violentos contra ciudadanos israelíes en sus plataformas de internet", según el pliego al que Efe ha tenido acceso.
Presentado el lunes ante la Corte del Estado de Nueva York, los demandantes exigen en particular la retirada de materiales audiovisuales y gráficos aparecidos estas últimas semanas en los que se instruye, por ejemplo, sobre la forma más eficiente de apuñalar a un persona y se incita a atacar a israelíes.
La ONG es conocida por casos anteriores en los que han demandado indemnizaciones a dirigentes palestinos en tribunales extranjeros por ataques en Israel.
La demanda va acompañada de decenas de ejemplos, entre ellos el post de uno de los atacantes palestinos del último mes, Mohanad Halabi, de 19 años, en el que, un día antes de su ataque, declaraba su "voluntad de ser shahid" y el comienzo de la "Tercera Intifada".
Halabi mató a dos israelíes en la ciudad vieja de Jerusalén e hirió a otros dos en un ataque con arma blanca y de fuego el pasado día 3, recién comenzada la espiral.
La ola de violencia, que estalló el 1 de octubre, se caracteriza por el uso masivo de las redes sociales, y expertos consideran que éstas son el motor que alienta a la movilización de jóvenes palestinos.
Consultada por Efe, Weissner señaló que la proclamación en público de querer convertirse en "shahid" puede incurrir, según las circunstancias, en un delito de "incitación", porque muchas veces es mucho más que una mera declaración.
Desde el día 1 se han producido unos cuarenta ataques palestinos perpetrados con arma blanca o de fuego, así como por atropello, y en los que han muerto diez israelíes y un eritreo, y unas 130 personas han resultado heridas.
Acompañada de incesantes manifestaciones y protestas contra el Ejército israelí en Jerusalén Este, Gaza y Cisjordania, la escalada se ha cobrado también las vidas de 59 palestinos (la mitad de ellos atacantes o supuestos atacantes), y un árabe-israelí que perpetró un ataque en Beer Sheva (sur de Israel).