"Hay una mala interpretación de una práctica que simplemente es para poder citar en más espacios formales", dijo el diputado.
Aseveró que "esto debería estar votándose en tres o cuatro meses más. O sea, queda mucha tramitación".
La Comisión a cargo de la materia tendrá una extensión de 15 días para votar en general esta iniciativa.
El diputado Giorgio Jackson aseguró que la decisión del Gobierno de poner suma urgencia al proyecto de reforma en educación superior no debería interferir en la tramitación.
Si bien la diputada comunista Camila Vallejo calificó la propuesta como un despropósito y lamentó que pueda ser usada como una medida de presión, Jackson dijo que se muestra dispuesto si es para recibir a más personas en la Comisión de Educación.
"Hay una mala interpretación de una práctica que simplemente es para poder citar en más espacios formales, pero esto debería estar votándose en tres o cuatro meses más. O sea, queda mucha tramitación", indicó.
El parlamentario aseveró que "lo que entiendo es que la medida de ocupar la suma urgencia es simplemente para facultar al presidente (de la comisión) a citar fuera de los horarios establecidos formalmente, o sea, para recibir a más gente".
La Comisión a cargo de la materia tendrá una extensión de 15 días para votar en general esta iniciativa, donde la comisión sesionará durante tres días a la semana y está en pleno proceso de audiencias para escuchar a distintas organizaciones, donde este lunes estuvo Educación 2020 y Libertad y Desarrollo.
Por su parte, el rector de la Universidad de Valparaíso y vicepresidente del Consejo de Rectores, Aldo Valle, sostuvo que "a mi también me parece altamente inconveniente que se le ponga suma urgencia a un proyecto que, por la materia, por la naturaleza de los temas tratados, requiere ser debatido y discutido con tranquilidad, con calma, buscando acuerdos".
"Especialmente aparece inadecuado la suma urgencia, considerando que era un proyecto que, hasta ahora, ha concitado fundamentalmente desacuerdos", agregó.
Rectora U. de Aysén envió oficio al Mineduc
Todo esto se da en medio del oficio que envió la rectora de la Universidad de Aysén, Roxana Pey, al Ministerio de Educación para pedir explicaciones.
Esto porque la semana pasada fueron firmados los estatutos y enviados a Contraloría, pero sin informarle.
"Alguien, que no sabemos quién, en el Ministerio (de Educación) seguramente debe haber modificado el estatuto, pero nunca eso fue informado a la universidad ni al rector (Ennio) Vivaldi tampoco. Nadie conoce el texto que fue firmado", denunció.
Hace 10 días, el Gobierno le pidió la renuncia a Pey por sus reiteradas críticas y porque no estaba alineada con el Gobierno y ella se negó. De ahí surgió un decreto de remoción para removerla, que también está en Contraloría en el proceso de toma de razón.
