La VII CIIE confirmó que es el nuevo símbolo de la apertura de China al mundo.
Dos jóvenes prueban un perfume en el stand de L'Oréal en la VII CIIE en Shanghai.
En pequeños talleres ubicados en lo profundo de la Cordillera de los Andes, familias peruanas que han estado tejiendo lana de alpaca durante generaciones, ahora fabrican a mano juguetes de peluche con esta preciada lana.
En un laboratorio de investigación del Grupo Michelin, el fabricante francés de neumáticos, los científicos se preparan para el lanzamiento de un neumático para vehículo lunar diseñado para soportar las fluctuaciones extremas de temperatura de la Luna, de entre 100 y -240 grados centígrados.
En una tienda de Aoyama, un equipo de artistas del minorista japonés Muji transforma una amplia gama de artículos antiguos de todo el mundo en productos modernos y utilizables.
Estas escenas pueden parecer muy distintas. Sin embargo, entre el 5 y 10 de noviembre, estos mundos separados se reunieron bajo un mismo techo en la VII Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE, por sus siglas en inglés).
La CIIE, que se celebra anualmente en una sala de exposiciones con forma de trébol en los suburbios occidentales de Shanghai, es la primera exposición a nivel nacional del mundo centrada en las importaciones.
Celebrado por primera vez en 2018, el evento nació en un momento en que el proteccionismo comercial global estaba nuevamente en aumento y cuando Estados Unidos acababa de decidir imponer aranceles adicionales a los productos chinos.
Lanzada en medio de crecientes conflictos comerciales, la CIIE ha avanzado a lo largo de los años hasta convertirse en una "meca del comercio global", como fue llamada en un artículo publicado en el sitio web de la BBC.
Desde su creación, más de 2.500 nuevos productos y servicios han hecho su debut en sucesivas CIIE. Los acuerdos firmados durante las primeras seis ediciones del evento fueron valorados en más de 420.000 millones de dólares.
Este año, la CIIE atrajo a participantes de 152 países, regiones y organizaciones internacionales, incluido un gran grupo de debutantes, entre ellos Noruega y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés). En total, asistieron a la exposición unas 3.500 empresas de 129 países y regiones. Esta colosal flota estuvo encabezada por 297 empresas de la lista Fortune Global 500 y líderes de la industria, el mayor número jamás visto en el evento.
"A medida que la desglobalización, el unilateralismo y el proteccionismo van en aumento, es aún más importante que China mantenga su compromiso, amplíe y mejore su apertura", dijo el primer ministro chino, Li Qiang, en su discurso en la ceremonia de apertura de la VII CIIE.
"Me alegró escuchar las declaraciones del primer ministro Li sobre la importancia del comercio abierto y el papel de la OMC en la regulación del comercio a nivel mundial porque, lamentablemente, hay demasiadas voces anticomercio en el mundo actual", expresó al semanario Beijing Review Jim Sutter, director ejecutivo del Consejo de Exportación de Soja de Estados Unidos (USSEC, por sus siglas en inglés).
La USSEC, que estableció una oficina en Beijing en 1982, ha participado en las siete ediciones de la CIIE, lo que ha fortalecido su papel como vínculo clave que conecta a los agricultores estadounidenses con China, el mercado más grande para la soja del país norteamericano.
Las relaciones China-Estados Unidos se pueden volver un poco turbulentas a veces, pero el comercio agrícola es como un contrapeso que evita que el barco se vuelque, y la CIIE es una de las formas de construir una relación a largo plazo en ese sentido, añadió Sutter.
Jean-Paul Agon, presidente del Grupo L'Oréal, la empresa de cosméticos más grande del mundo, fue uno de los muchos representantes empresariales en la CIIE de este año que llevaron sobre el pecho el número 7, una insignia de honor para las marcas que han participado en las siete ediciones del evento.
Agon se unió a L'Oréal en 1978, el año en que China lanzó su política de Reforma y Apertura. Tras percibir el enorme potencial del gigantesco mercado chino aún sin explotar, Agon creó L'Oréal China en 1997 y estableció su sede en Shanghai.
"Comenzamos desde cero, con solo 10 personas metidas en un apartamento, y ahora es la marca de belleza número uno en China y una de las mayores subsidiarias de L'Oréal en todo el mundo", afirmó. "China es el único país del mundo que es diferente cada vez que vengo", añadió.
Dieciséis años después de que L'Oréal ingresara a China, el país inauguró su primera zona piloto de libre comercio (ZLC) en Shanghai. Desde entonces, se han establecido 22 zonas francas piloto en todo el país para promover la innovación en la facilitación del comercio y la inversión.
El país también se ha comprometido a fomentar un entorno favorable para las empresas extranjeras. La recientemente publicada edición 2024 de la lista negativa nacional para la inversión extranjera ha eliminado todas las restricciones de acceso al mercado en el sector manufacturero.
China apoya firmemente a los países en desarrollo para que compartan mejor los beneficios generados por la globalización. En septiembre de este año, China anunció que a partir de diciembre eliminaría los aranceles sobre las importaciones procedentes de 43 de los países menos adelantados (PMA) del mundo.
Durante la CIIE de este año, se proporcionaron más de 120 stands de exposición gratuitos a 37 PMA, en los que se exhibieron especias de Etiopía, frutas tropicales producidas en Laos y tapices tradicionales de Nepal, junto con productos de las grandes multinacionales.
Según la Administración General de Aduanas de China, el valor total del comercio exterior del país ha aumentado de 31 billones de yuanes (4,3 billones de dólares) en 2018 a 42 billones de yuanes (5,8 billones de dólares) en 2023, un aumento del 37 %.
"No existe otra exposición en el mundo como la CIIE, que es realmente una propuesta única de China y un símbolo de la apertura de China al mundo", destacó Agon.
Probablemente uno de los stands más populares en esta edición de la CIIE fue el de Theland, una empresa láctea de Nueva Zelanda y otra participante del evento durante siete años. El 6 de noviembre, Li Jiaqi, el influencer más reconocido de China en el sector de la belleza, organizó un espectáculo transmitido en vivo en el stand de la compañía para lanzar una serie de nuevos productos.
"Hemos estado creciendo constantemente aquí", manifestó a Beijing Review Roy van den Hurk, director ejecutivo de la compañía, quien también participó en la transmisión.
Theland comenzó con un stand de solo 50 metros cuadrados en la CIIE de 2018, pero las ventas de la marca, entonces recién llegada al mercado chino, despegaron inmediatamente después de su participación. En menos de un año, sus ventas se multiplicaron por 26.
"Lo que ofrece la CIIE no son ganancias únicas para una sola empresa o país, sino más bien un sistema completo de procesos que garantiza beneficios para todos", comentó Sheng Wenhao, director ejecutivo de Theland Asia Pacific Region.
En la CIIE de este año, la compañía lanzó su primer producto lácteo para personas mayores.
Theland es solo una de las muchas empresas extranjeras que aprovechan las tendencias de consumo emergentes de China y se involucran con la economía china de maneras cada vez más innovadoras a través de la CIIE.
"China no es solo un mercado enorme, sino también una gran fuente de inspiración y creatividad", consideró Yann Bozec, presidente de la filial de Asia-Pacífico de Tapestry, una multinacional de la moda estadounidense y la empresa matriz de Coach, Kate Spade y Stuart Weitzman.
Lo más destacado de la exposición de este año fue la deslumbrante colección de dispositivos de alta tecnología de todo el mundo.
Las fuerzas productivas de nueva calidad -un concepto propuesto por primera vez por el presidente chino, Xi Jinping, en septiembre de 2023- abarcan la adopción de tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial, los macrodatos y la computación en la nube, con el fin de mejorar la productividad, la eficiencia y la competitividad en diversas industrias.
Entre las muchas industrias que surgieron bajo este nuevo modelo de desarrollo, los semiconductores, probablemente uno de los temas más candentes en el mundo tecnológico actual, siguen siendo una frontera clave para el despliegue de fuerzas productivas avanzadas.
Kokusai Electric, una empresa japonesa de fabricación de semiconductores, fue una de las que hicieron su debut en la CIIE de este año.
Otro tema que destacó en la VII CIIE fue la sostenibilidad. Una estrella de la exposición fue un sistema de captura directa de aire desarrollado por GE Vernova, una empresa de servicios y fabricación de equipos energéticos con sede en Massachusetts, Estados Unidos.
Xu Xin, presidente de GE Energy Investment (China) y presidente de GE Vernova Gas Power China Services, declaró que la CIIE "es una plataforma donde el futuro se desarrolla ante nuestros ojos".
Y ese futuro encierra muchas posibilidades. Cuando se le preguntó sobre sus expectativas para la VIII CIIE del próximo año, Roy van den Hurk, director ejecutivo de Theland, admitió que no estaba seguro de ellas, ya que cada edición del evento, con el continuo aumento de nuevas tendencias, avances y desafíos, es una experiencia completamente diferente a las anteriores.
"Lo único que sé es que el mundo seguirá cambiando y que la CIIE seguirá evolucionando", concluyó.
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