Teitelboim dijo que la longevidad de Pinochet servirá para conocer la verdad
El literato criticó, además, a los actuales intelectuales que "dan la espalda a la realidad" por temor a perder presencia en el medio cultural nacional.
El literato criticó, además, a los actuales intelectuales que "dan la espalda a la realidad" por temor a perder presencia en el medio cultural nacional.
El escritor Volodia Teitelboim, Premio Nacional de Literatura 2002, manifestó este miércoles su deseo de que el ex dictador Augusto Pinochet "viva mucho aún", para beneficio "de la memoria histórica" del país.
La longevidad de Pinochet, a juicio de Teitelboim, servirá para que se conozca a fondo que él y su dictadura (1973-1990) fueron responsables no sólo de violaciones de los derechos humanos y falta de libertades, sino también de corrupción, como se ha desvelado en las últimas semanas.
El descubrimiento de que el ex dictador, de 86 años, mantenía millonarias cuentas secretas en el Riggs Bank de Estados Unidos reveló, a juicio del autor de "Los dos Borges", una nueva faceta de su régimen, al que incluso muchos de sus detractores veían como autoritario pero honesto.
"Se decía que (Pinochet) metía los pies, pero no las manos, pero el tiempo ha demostrado lo contrario", afirmó en una reunión con corresponsales de la prensa extranjera quien también fue senador y secretario general del Partido Comunista.
En ese contexto, el escritor de 90 años añadió, "tienen razón los que quieren que no se muera aún", pues la vida "va completando las biografías".
A juicio de Teitelboim, también biógrafo de los poetas Gabriela Mistral, Vicente Huidobro y Pablo Neruda, Pinochet debe ser juzgado por las cuentas secretas del Riggs Bank, porque "no está loco y tiene responsabilidad penal".
En ese contexto, consideró "lamentable" la resolución de la Corte Suprema que en 2002 liberó a Pinochet de responder en juicios por violaciones de los derechos humanos.
Según Teitelboim, "Pinochet es cero, pero el pinochetismo es fuerte y aspira a ganar lo único que perdió tras el término del régimen militar: la administración del modelo neoliberal desde la presidencia".
Teitelboim elogió la transición española, "que hizo posible la extinción del franquismo", en contraposición a la chilena, que salvo "algunos logros dignos", ha permitido la existencia de una democracia "a medias".
Esta realidad, en su opinión, alcanza también a la cultura, pues los intelectuales, por el temor de perder presencia o actualidad, "dan la espalda a la realidad" y ya no existe la literatura crítica que se dio durante el siglo XX en todo el mundo.
Volodia Teitelboim, que este año será miembro del jurado que discernirá el Premio Nacional de Literatura -"algo que no me gusta porque es la forma más directa de ganar enemigos"-, trabaja actualmente en una biografía de Juan Rulfo.
El escritor mexicano es "fundamental y representativo del mundo iberoamericano", con una obra "exigua pero que sólo se puede calificar de excelente", concluyó Teitelboim, que hoy convive con la "amante furtiva" que merodeó en su vida durante los 60 años que estuvo casado con la política. (EFE)