Una serie de críticas y dudas ha dejado el proceso de adquisición de las casas de los expresidentes Salvador Allende y Patricio Aylwin, en Providencia, por parte del Ministerio de Bienes Naciones.
Según anunció el Ejecutivo en diciembre pasado, la intención que es ambos inmuebles tengan fines patrimoniales, dado "el importante rol que jugaron dos exmandatarios de la República en la historia de Chile y en la construcción de nuestra patria".
Se trata de dos propiedades contiguas en las que vivió el expresidente Aylwin, ubicadas en calle Arturo Medina 3678 y 3684; y de la propiedad que habitó el expresidente Allende, en Guardia Vieja 392, todas en la comuna de Providencia.
Los mayores cuestionamientos se han provocado en el caso de la vivienda de Allende, que se estaría vendiendo en cerca de 933 millones de pesos.
Según el Registro de Propiedades del Conservador de Bienes Raíces de Santiago, una de las dueñas de la casa del otrora mandatario socialista es su nieta y ministra de Defensa, Maya Fernández.
La secretaria de Estado y su hermano son los propietarios oficiales del inmueble desde 1998, cuando le compraron la vivienda a su tía, la actual senadora Isabel Allende -hija del derrocado presidente-, por cerca de 500.000 pesos en partes iguales.
Se han levantado dudas respecto a la posibilidad algún conflicto de interés al respecto.
"Es un negocio", afirma la UDI
Debido a esto, la UDI acudió a la Contraloría para que paralice la compra de esta casa.
El diputado Álvaro Carter señaló que "la ley es clara: el artículo 37 bis deja claro que durante el ejercicio de su cargo, los ministros estarán sujetos a la prohibición de celebrar contratos con el Estado. Y vender la casa de Allende al Estado, de la cual es hoy dueña la ministra de Defensa, es justamente no respetar esa norma".
"Esperaría que la ministra desista de la venta; si no, nosotros recurriremos a todas las instancias para evitar este negocio, porque eso es un negocio", advirtió el parlamentario gremialista.
"Es sorprendente cómo el Gobierno compra una casa de 1.000 millones cuando dice que no hay dinero. Basta de la ideología que vivimos hoy. Estamos en una crisis de seguridad y este Gobierno anda pensando en cualquier cosa menos lo que tiene que hacer, que es defender a miles de chilenos y chilenas", concluyó Carter.
"Es un procedimiento que todavía está en curso", dice Interior
La situación fue abordada por el ministro subrogante del Interior, Luis Cordero, quien reiteró que "la adquisición de estas dos viviendas, tanto la del expresidente Aylwin como la del expresidente Allende, tienen fines patrimoniales y de memoria".
"La realización del procedimiento respectivo está a cargo del Ministerio de Bienes Nacionales y es en ese contexto donde se ha llevado a cabo. Es un procedimiento que todavía está en curso. Yo supongo que es en ese contexto se han hecho las evaluaciones legales, pero no es una compra, entiendo yo, finiquitada", analizó el secretario de Estado.
"Simplemente puedo decir que eso es un proceso de compraventa de un bien privado en curso. Sobre esa situación, a mí no me corresponde pronunciarme en estos momentos", puntualizó Cordero.
Según informaban en el Ejecutivo el mes pasado, de concretar dichas compras, las residencias pasarán a formar parte del patrimonio del Estado de Chile y quedarán bajo la administración de Bienes Nacionales.
"Un compromiso del Estado", destaca Culturas
Además, el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, a través del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, espera trabajar con las familias y las fundaciones vinculadas a los exmandatarios para concretar los proyectos de museo, logrando abrir sus puertas a la ciudadanía.
La ministra de las Culturas, Carolina Arredondo, defendió que "hay un compromiso por parte del Estado de poder resguardar un patrimonio. Aquí hay un proceso de compra que tiene y que sigue un protocolo anclado al Ministerio de Bienes Nacionales, que es quien adquiere para el Fisco".
"Lo que esperamos, por supuesto, en un futuro es que esas casas de dos Presidentes que fueron democráticamente electos en nuestro país puedan tener un guión museográfico, puedan ser abiertas a la ciudadanía y con eso podamos poner en valor la historia también de nuestro país", añadió la secretaria de Estado.
