Juan Ramón Carrasco señaló que en su país "todo el mundo sabe" del pacto que permitió al combinado charrúa dirigido en ese entonces por Víctor Púa ir al Mundial 2002.
El ex seleccionador de Uruguay, Juan Ramón Carrasco, afirmó este miércoles que estaba acordado el empate 1-1 entre el combinado charrúa y Argentina en las eliminatorias del Mundial 2002, porque con una derrota el equipo de su país hubiera faltado a una Copa del Mundo por tercera vez consecutiva.
"Si no arreglan ese empate con Argentina, porque eso fue un arreglo, era para Uruguay el tercer Mundial sin ir", dijo Carrasco desde Montevideo a Radio Aspen de Buenos Aires.
El encuentro se disputó el 14 de noviembre de 2001 en el Estadio Centenario de Montevideo. Con el empate, que eliminó a Colombia, Uruguay pudo jugar un repechaje contra Australia y participar en el Mundial de Corea del Sur y Japón 2002.
Los goles los marcaron en la primera parte el local Darío Silva (18') y Claudio López (44') y el encuentro fue arbitrado por el alemán Markus Merk, asistido por sus compatriotas Heiner Müller y Frank Schumacher.
Al ser consultado si se refería a "un arreglo de partes", Carrasco respondió: "Sí, es bien sabido. Acá (en Uruguay) todo el mundo lo sabe, que arreglaron para empatar porque Argentina ya estaba clasificada".
En ese tiempo el elenco celeste era dirigido por Víctor Púa y Argentina era adiestrado por Marcelo Bielsa.
La prensa deportiva argentina destacó en aquel momento que ambos equipos habían renunciado a jugar ofensivamente en la segunda parte del encuentro.
"Con la camiseta que sea, siempre hay que tener dignidad", comentó Carrasco, al recordar que él mismo tuvo problemas por anotar un gol para Nacional de Montevideo ante Defensor Sporting debido a que ese tanto ayudó a que Peñarol, histórico rival del Nacional, se coronara campeón uruguayo en 1997.
"La verdad es que muchos dirigentes hasta el día de hoy me crucificaron por ese gol", comentó Carrasco, quien dirigió a Uruguay en el primer tramo de las actuales clasificatorias del Mundial Alemania 2006.
Al referirse a esa etapa, dijo que en Uruguay "es mala palabra jugar ofensivamente" y que con su sucesor, Jorge Fossati, el combinado charrúa "volvió a lo Uruguay, a más de lo mismo: siempre pensando en el arco local, con algún contragolpe, pelota quieta, apostar a eso".
Según Carrasco, Uruguay sufrirá el próximo sábado 9 de octubre en el partido que jugará contra Argentina en Buenos Aires, por la novena fecha de las actuales clasificatorias.
"Marcelo Bielsa siempre me gustó, no sólo por su estilo ofensivo, sino también por su criterio de que los 11 jugadores recuperen el balón. Estoy seguro de que Argentina lo va a extrañar", dijo al referirse a la selección albiceleste.
"Con Pekerman, quizás Argentina no sea tan ofensiva y tan contundente, pero conservará su funcionamiento porque los jugadores lo conocen de las selecciones juveniles". (EFE)
