El entrenador de los verdeamarillos manifestó que el duelo del próximo sábado, por los cuartos de final de la Copa América, no será igual al disputado por la primera fase en la ciudad de Maturín.
El técnico de la selección brasileña, Carlos Dunga, manifestó que el próximo duelo ante Chile, válido por los cuartos de final de la Copa América, será muy diferente al disputado el sábado 30 de junio en la ciudad de Maturín, que terminó a favor de los pentacampeones del mundo por 3-0.
"Ahora será muy diferente, será decisivo. El que pierde se va para su casa y eso hará que sea un juego duro, difícil y cerrado", estimó el DT sobre el duelo de este sábado 7 de julio.
"En general, la Copa América es un torneo difícil para la selección de Brasil porque los rivales son duros, se cierren en su defensa y se hace complicado conseguir goles", agregó tras la victoria 1-0 sobre Ecuador, marcador que le permitió clasificarse en el segundo lugar del Grupo B, tras el líder México.
Dunga desestimó que su equipo dependa del nivel individual de Robinho, autor de los cuatro goles que ha conseguido el elenco verdeamarelho en el certamen más antiguo a nivel de selecciones.
"Robinho es un jugador inteligente y poseedor de una gran técnica, pero necesita de sus compañeros. El fútbol es un deporte colectivo y para lograr buenos resultados todos los futbolistas son importantes", agregó.
El técnico brasileño afirmó, además, que la selección de Ecuador complicó a su equipo "en especial porque tiene futbolistas potentes y que manejan bien el balón".
"Hoy (miércoles) no salió un buen partido, pero el resultado fue bueno para Brasil. El equipo va mejorando en su juego, no tuvimos mucho tiempo de preparación y en cada encuentro los futbolistas se entienden mejor", agregó Dunga. (EFE)
