EL intendente apuntó a que los directivos son culpables que el balompié nacional sea "una industria de mala calidad", por los enfrentamientos entre barristas y el deficiente nivel de los estadios.
El intendente metropolitano Víctor Barrueto hizo un llamado a los dirigentes de clubes y la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) a asumir su cuota de culpa en los problemas que atraviesa el fútbol nacional, como la violencia entre barristas y deficiencias en los recintos deportivos.
"Yo hago un llamado a que los dirigentes asuman la responsabilidad global: tiene que ver con las barras, con la calidad de los estadios. No puede ser que tengamos recintos en las condiciones actuales y todos miren para el techo y no se asuma esto", apuntó Barrueto en rueda de prensa.
Para la autoridad regional, urgen cambios profundos que permitan levantar la actividad. "Lo importante es que se le meta bisturí al fútbol en su conjunto. El fútbol es una industria de mala calidad", señaló.
Barrueto aseguró que la Intendencia cumplió su labor en la suspensión del choque Santiago Morning-Colo Colo el viernes 24. "Yo asumí la responsabilidad que me correspondía", indicó.
"El fútbol tiene que pegarse un salto, ponerse pantalones largos, porque ellos son los protagonistas principales. Me parece absurdo que el intendente sea protagonista del tema", agregó.
Las propuestas
Barrueto planteó algunas medidas para mejorar el espectáculo, como revisar la Ley de Violencia en los Estadios. "La gente está atemorizada frente al fútbol. No sólo los que van al estadio o los que quisieran ir, sino en general", sostuvo.
Además, el intendente llamó a los hinchas a acudir al Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) si no se sienten satisfechos
por los escenarios de los espectáculos.
Carlos Toro: "No veo que medidas podríamos tomar"
El gerente general de la ANFP, Carlos Toro, replicó a los dichos de Barrueto apuntando a que sus propuestas son inviables, recalcando que el tema de la violencia es de "seguridad pública".
"No veo qué medidas podamos tomar nosotros para combatir la violencia en los estadios. Por ejemplo, si tomamos todo un bus con lumpen, y no los dejamos comprar entradas, estos tipos se van al Sernac y me van a pasar una multa -cuantiosa porque es de un millón (de pesos)- por cada uno, por negativa de venta en un evento público", señaló.
"Y si compran entradas, y les prohíbo que entren al estadio, me van a hacer un recurso de protección porque les estoy vendiendo un servicio al que les niego la entrada. Este es un problema de seguridad pública y corresponde a las fuerzas policiales del Estado", añadió el dirigente. (Cooperativa.cl)
