El ex volante presentó su renuncia a la gerencia deportiva del cuadro "albo".
"Sólo -queda- mirar al futuro y aceptar la situación como corresponde", expresó.
Jaime Pizarro, quien presentó su renuncia al cargo de gerente deportivo de Colo Colo, reconoció que dejará el club estando tranquilo, porque durante su periodo trabajó con plena convicción en lo que realizó.
"Sí, me voy tranquilo. Uno puede tener la dedicación y compromiso, eso no garantiza los mejores resultados. Pero si uno apela a la íntima convicción, sí, yo tengo la íntima convicción", indicó una vez confirmada su dimisión por el presidente de Blanco y Negro, Carlos Tapia.
"Creo que uno debe actuar con el mayor cuidado posible porque hay una institución a la cual le tengo mucho afecto", agregó.
Pizarro evitó realizar una autocrítica a su periodo en la gerencia deportiva, pero sí manifestó que pudo hacer mejor algunas cosas.
"Hay situaciones respecto del rendimiento y de la estructuración del plantel que uno puede hacer mejor, es el desafío que viene para el futuro", explicó.
El ex volante del elenco albo aseguró que entiende su partida del club como una realidad del escenario de la actividad.
"Indudablemente entiendo las realidades, conozco bien el escenario de la actividad deportiva y la exigencia. Sólo -queda- mirar al futuro y aceptar la situación como corresponde", complementó.
"Espero que esto se finiquite rápidamente, lógicamente esperaré los días que correspondan", cerró.
Pizarro llegó en marzo del 2011 a Colo Colo, nombrado por la directiva en ese momento encabezada por Hernán Levy y tuvo activa participación en el nombramiento del técnico Ivo Basay, quien fue despedido del club por malos resultados.
