Juez que cobró dos penales contra Real Madrid denunció amenazas de muerte
Javier Turienzo Alvarez, quien arbitró en la derrota de la tienda "merengue" ante Racing de Santander, ha recibido más de 50 intimidadoras llamadas telefónicas.
Javier Turienzo Alvarez, quien arbitró en la derrota de la tienda "merengue" ante Racing de Santander, ha recibido más de 50 intimidadoras llamadas telefónicas.
El árbitro Javier Turienzo Alvarez planea presentar una denuncia ante la policía tras asegurar que fue objeto de amenazas de muerte tras una derrota de Real Madrid en el campo de Racing de Santander, el pasado sábado 14 de abril.
Turienzo Alvarez dijo que ha recibido "más de 50 llamadas telefónicas", luego de cobrar dos penales en el segundo tiempo para que Racing venciera por 2-1.
La derrota minó las esperanzas de Real Madrid de ganar la liga española, al quedar a cinco puntos del líder FC Barcelona con ocho fechas por disputar.
"Voy a denunciar las amenazas, porque quiero que cesen. Son amenazas fuertes, que atentan contra mi vida y las de mis familiares", dijo Turienzo Alvarez.
El juez, quien no puede referirse a sus decisiones arbitrales debido al reglamento que rige su actividad, señaló que teme más por sus familiares que por él mismo.
"Tengo una niña de seis años que ayer (lunes) volvió llorando del parque", indicó el árbitro de 40 años. "Mi hija me dijo: 'Los niños me dicen que fastidié a Real Madrid'. Y a mí se me cae el alma al suelo".
Dirigentes del club merengue cargaron sobre Turienzo Alvarez la culpa por la derrota, y su director deportivo Predrag Mijatovic afirmó que "cosas extrañas" le han pasado al equipo esta temporada.
La comisión de arbitrajes de España pidió a la federación nacional tomar medidas contra Mijatovic, según versiones de prensa.
En un comunicado, Real Madrid deploró los insultos y amenazas recibidos por Turienzo Alvarez.
El club consideró "intolerable que las críticas a una determinada actuación arbitral, que pueden ser perfectamente legítimas, se conviertan en insultos y amenazas que afectan no sólo a la persona del árbitro en cuestión, sino, lo que es aún más grave, a su familia". (Agencias)