En el contexto de rechazo generalizado del mundo del fútbol tras los incidentes que terminaron con un policía muerto, y que llevaron a la suspensión del calcio hasta nuevo aviso, el Papa Benedicto XVI se sumó a las condenas por la violencia en los estadios.
El alemán Joseph Ratzinger lamentó "los gestos de violencia que manchan el mundo del fútbol" y exhortó al respeto de la legalidad, en el telegrama de pésame por la muerte del policía Filippo Raciti, ocurrida el sábado durante los enfrentamientos tras el encuentro Catania-Palermo, en Sicilia.
En el telegrama, que fue hecho publico este lunes y enviado al Arzobispo de Catania, Salvatore Gristina, el Papa exhortó "a los protagonistas a promover con mayor determinación el respeto de la legalidad favoreciendo la lealtad, la solidaridad y la sana competitividad".
Asimismo, Ratzinger expresó su cercanía a los familiares de Raciti y al resto de los heridos y agentes de policía empeñados junto a otras fuerzas del orden a mantener la seguridad de los ciudadanos.
Uno de los más famosos presentadores de la televisión italiana, el siciliano Pippo Baudo, acusó al Papa el domingo durante uno de los programas de máxima audiencia de la cadena estatal RAI, por no haber hablado del tema durante el Angelus dominical, y a la Iglesia italiana por no haber suspendido las fiestas patronales en Catania, donde se produjeron los altercados.
El portavoz del Vaticano, padre Lombardi, señaló que se trataban de "criticas no apropiadas", ya que representantes de la Santa Sede habían condenado el episodio, como el "Osservatore Romano", que pidió la suspensión durante al menos un año del campeonato. (EFE)