Boavista fue condenado a bajar a la Segunda División portuguesa y el presidente de FC Porto, Nuno Pinto da Costa, no podrá ocupar cargos deportivos durante dos años, en decisiones adoptadas este viernes por el comité de disciplina de la liga lusa.
Ricardo Costa, presidente del organismo disciplinario dijo que fue probado el acto de coacción sobre los árbitros por parte de los dirigentes del club (con 105 años de existencia), en un partido frente a Benfica, en enero de 2004.
Mientras era leída la sentencia, decenas de hinchas de Boavista, elenco donde jugó ese año el chileno Felipe Flores, intentaron invadir la sede de la LPLF, en la ciudad de Oporto.
Este proceso fue denominado "silbato final", pero se deriva del conocido caso de corrupción conocido como "silbato dorado", aún pendiente de juicio en los tribunales ordinarios.
La sanción contra Pinto da Costa, presidente del club campeón de esta temporada, se debe a intentos comprobados de soborno de árbitros también en la temporada 2003-2004, agregó Costa.
El árbitro Agusto Duarte fue condenado a seis años de suspensión, debido a una visita que realizó a la casa de Pinto da Costa antes del partido Beira Mar-FC Porto, durante la cual le fue ofrecida una alta cantidad de dinero para permitir la victoria portista.
Varios jueces también fueron suspendidos por "tentativa de soborno" por parte de Pinto da Costa.
Entre ellos, Jacinto Paixao (cuatro años de castigo), José Chilrito y Manuel Cuadrado (dos años y medio).
Todos los partidos en estos procesos son de la temporada 2003-2004.
El comité de disciplina retiró seis puntos al club FC Porto, pero esto no afecta su categoría ya alcanzada de campeón de liga, pues el más cercano perseguidor (Sporting) se encuentra a 20 puntos de distancia y este fin de semana se juegan los últimos partidos de la temporada. (EFE)