Nicolás Massú tras su eliminación olímpica: "Hay que saber perder''
El viñamarino cayó ante el argentino Nalbandian y no logró reeditar su histórica actuación de Atenas.
Pese a todo, sacó lecciones positivas tras el certamen chino.
El viñamarino cayó ante el argentino Nalbandian y no logró reeditar su histórica actuación de Atenas.
Pese a todo, sacó lecciones positivas tras el certamen chino.
El tenista nacional Nicolás Massú (125° de la ATP) se tomó con entereza la derrota de este martes ante el argentino David Nalbandian (8°) en la segunda ronda del torneo olímpico de Beijing 2008, resultado que le impidió reeditar sus medallas de oro conseguidas en Atenas 2004.
Pese a la tristeza de la derrota, el viñamarino se mostró conforme con el nivel tenístico exhibido en el certamen asiático.
"Obviamente que cuando se pierde hay un poco de tristeza. Uno siempre viene esperando ganar y hacer lo mejor. Pero me tocó perder; me tocó un jugador difícil, que jugó bien y que está número ocho del mundo'', dijo el chileno tras el partido.
El segundo singlista nacional indicó que la derrota en el primer set, que fue muy ajustado, fue clave en sus aspiraciones.
"Creo que tuve mis posibilidades en el primer set. Pero luego de ganarlo, Nalbadián agarró confianza y jugó bien. El tenis es un deporte en el que, sobre todo en cemento, no es muy fácil sacar diferencia. El partido estuvo muy parejo hasta el 6-5. En un momento cuando quise hacer un poco más, pero empecé a fallar. Y luego él ganó el primer set y se soltó y agarró confianza. Yo quizás bajé un poquito en el segundo set, pero también se debió a que mi rival me llevó a eso'', aseguró.
Orgulloso de su logro de Atenas
Respecto de su temprano adiós a la posibilidad de pelear por un nuevo podio olímpico, Massú indicó que sabía lo complicado que sería reeditar la historia actuación de Grecia.
"Creo que las personas que hacen deporte a un nivel alto sabemos lo difícil que es. Aquí solamente gana uno. Uno gana la medalla de oro y el resto todos pierden. Y entonces creo que no siempre se puede ganar. Hay que saber perder también. Duele perder, pero esto es así. En la vida no siempre se gana'', indicó.
"Esto sirve para saber valorar lo que uno hizo hace cuatros años. Hasta yo mismo a veces miro para atrás y digo que increíble lo que hice: ganar singles y dobles. No era fácil venir para acá y repetir lo que hice en Atenas. Lo tenía más que claro. Entonces me siento orgulloso de haber ganado mis dos medallas de oro en Atenas. Ahora me tocó perder y también lo asumo, como lo tendrán que asumir los 63 jugadores que restan en el torneo, porque uno sólo ganará'', aventuró.
Pese a todo, el viñamarino señaló que sacará lecciones positivas luego de su participación en el torneo chino.
"Me voy tranquilo porque sé que estoy jugando cada día mejor. Yo siempre me voy tranquilo porque entrego lo mejor de mí. Y si no me alcanzó, bueno, no me alcanza nomás. Hace seis meses atrás estaba perdiendo con jugadores con los que normalmente no perdía, o me iba en primera ronda. Y ahora estoy empezando a ganar partidos de vuelta. Es como para quedarse tranquilo'', puntualizó.