El estadounidense se sorprendió por las quejas del equipo serbio.
En tanto, Milorad Cavic reconoció la derrota y se mostró contrario al reclamo.
El nadador estadounidense Michael Phelps dijo en Beijing, sobre la protesta de Serbia que consideró que su nadador Milorad Cavic ganó los 100 metros mariposa, que "el marcador dice que yo puse la mano en el muro primero".
La Federación Internacional de Natación (FINA) confirmó el resultado de la final, en la que el oriundo de Baltimore se impuso al balcánico, tras el reclamo presentado por el equipo de Serbia.
"El sistema dice esto. Yo siempre he oído que no puede haber un error en el sistema de cronometraje. Lo único que puedo decir es que fue una carrera dura y que nadé lo mejor que pude", dijo Phelps que sumó su séptima medalla olímpica de oro en Pekín e igualó el récord de su compatriota Mark Spitz de 1972.
Yo sabía que no estaba tan detrás de Cavic como en la eliminatoria. Cuando corté la última brazada, pensé que me costaría la carrera. Pero fue justamente lo contrario. Si yo me hubiera deslizado, no habría ido tan lejos. Hice dos rápidas brazadas cortas para intentar llegar y tocar el muro. Al final tome la decisión correcta", explicó.
El norteamericano manifestó en una rueda de prensa: "Vi la carrera después en la pantalla gigante y la vi a cámara lenta, imagen a imagen, en la cámara de masaje en el ordenador". Destacó que había ganado por una sola centésima, el margen más estrecho de victoria en la natación, y que tras la carrera no sabía del reclamo de los serbios, algo que lo sorprendió.
Las siete medallas
Sobre el récord de Mark Spitz, que igualó con siete preseas doradas en unos Juegos Olímpicos, dijo: "Esto demuestra que no importa lo que pongas en tu imaginación, que cualquier cosa puede pasar. Sueña tanto como puedas soñar y cualquier cosa será posible".
"Algunas personas decían que esto sería imposible y no pasaría. Esto muestra que cualquier cosa puede suceder. Antes de que yo fuera a entrenar con Bob (Bowman, entrenador del equipo de Estados Unidos) es el único que realmente me ayudó a querer soñar acerca de cualquier cosa", manifestó.
"Yo quería ser un atleta profesional, y sí quería ganar medallas olímpicas, pero él es el único que me dijo que soñara, que soñara tanto como pudiera. Finalmente ha ocurrido. El duro trabajo que Bob y yo hemos realizado juntos, nos ha dado sus frutos", señaló.
Cavic reconoció la derrota
En tanto, el serbio Milorad Cavic se mostró contrario a la medida de su equipo. "Si es por mí, hubiera retirado la protesta", declaró.
Agregó que "vi la carrera unos minutos después y oí algunas cosas sobre un protesta, pero no pienso sobre eso. Es grande ganar una medalla. Yo no puedo despegar. Yo sé que tengo una llegada larga y Phelps una corta. No estoy enfadado".
"Llegué pensando en el bronce y conseguí la plata. Esto es lo que los resultados muestran en la pantalla", continuó.
"Ganar por una centésima es difícil. Es la derrota más dura. Pero es un milagro que yo esté aquí considerando que hace un año y medio me iba a retirar. Estoy disfrutando de corazón y desearía haber ganado una medalla de oro, pero estoy feliz con la plata", dijo.
Cavic explicó que "esperaba que fuera por el récord del mundo, pero es un honor nadar con Michael Phelps. Fue grande que todos los ojos estuvieran en mí mirando al chico que podía batir a Michael Phelps. Es una pena que no acabáramos los dos en 50"58. Me hubiera gustado compartir el oro. Creo que si lo hacemos otra vez, yo ganaré el oro".
