Se repitió la historia para la selección española de fracasos mundialistas y el entrenador de los ibéricos, Luis Aragonés, manifestó que su elenco pagó caro los dos errores que en el segundo tiempo significaron los goles del triunfo para Francia por 3-1.
El DT español lamentó la falta de madurez para enfrentar instancias relevantes y rescató que los menos experimentados deben sacar enseñanzas de estas duras caídas.
"Cuando todos los jugadores entregan todo lo que tienen, no hay nada que objetar. Dos errores significaron dos goles. Tenemos que aprender la lección. En esta selección hay gente muy joven que tiene que aprender de partidos como éste", afirmó Aragonés.
El seleccionador español insistió en que su equipo dio la talla y resaltó que es un cuadro, "muy joven, con mucho futuro por delante y llegará otra oportunidad".
En tanto, el volante Cesc Fábregas, que este martes fue titular ante Francia, se mostró desolado. Abandonó el terreno de juego con lágrimas en los ojos y luego no pudo disimular su decepción.
"Lo sentimos mucho, sobre todo por la gente, que nos ha estado apoyando desde el principio. Hemos intentado darlo todo, pero no ha podido ser", aseguró el jugador de Arsenal de Inglaterra.
El portero de la selección española Iker Casillas confesó que la derrota por 3-1 frente a Francia en octavos de final "ha sido un palo muy duro" porque todos los miembros del equipo estaban convencidos de que iban a seguir en competencia.
"El primer gol de Francia nos desbarató los planes y también hemos tenido mala suerte", finalizó el arquero de Real Madrid. (EFE)