El Banco Central acordó este jueves mantener la tasa de interés de política monetaria en 2,50 por ciento anual, principalmente porque las condiciones financieras globales permanecen favorables.
Según el informe del instituto emisor, la mayor novedad del mes es el aumento de los precios de algunas materias primas, en particular el cobre - el mayor producto de exportación de Chile- y el petróleo.
En el plano externo, la actividad global y sus perspectivas no muestran mayores novedades, manteniéndose las señales de mayor dinamismo, precisa en su análisis.
Añade, que en el plano interno, la inflación de septiembre pasado tuvo una importante sorpresa a la baja, con lo que su variación anual descendió hasta 1,5 por ciento.
Las expectativas de inflación para plazos cortos se redujeron significativamente y para plazos más largos tuvieron ajustes acotados, según el Banco Central.
Los datos conocidos del tercer trimestre muestran que la evolución de la actividad y la demanda se enmarcan en el escenario base del Informe de Política Monetaria, y sigue destacando el mejor desempeño relativo de las ramas ligadas al consumo en comparación con las relacionadas con la inversión.
En tanto, el comportamiento del consumo privado es acorde con el desempeño del mercado del trabajo y expectativas que se han tornado menos pesimistas.
El instituto emisor reafirma su compromiso de conducir la política monetaria con flexibilidad, de manera que la inflación proyectada se ubique en 3 por ciento en el horizonte de dos años.