Mediante un inserto a página completa en diarios nacionales, la empresa papelera CMPC realizó un mea culpa por la colusión en los precios del papel higiénico de la que fue protagonista, junto a SCA (ex Pisa), por al menos 11 años y que fue revelada en 2015.
En el texto, titulado "Las lecciones que aprendimos", la compañía destaca que está dando sus "primeros pasos" para superar los resabios del escándalo, que "más que una mala práctica, es un caso que afectó a muchas personas y produjo un profundo daño en las confianzas de nuestro país".
"Hemos comprendido que no basta con pedir perdón ni con restituir los cobros indebidos", apunta la empresa, comprometiéndose a asegurar que "hechos como éstos no nos vuelvan a ocurrir (...) y la mejor forma de avanzar es cambiando nuestras conductas".
En esa línea, resalta que desde que estalló el caso en octubre de 2015 ha tomado varias medidas, como realizar "una profunda renovación del gobierno corporativo", haber "incorporado nuevos ejecutivos" y "revisar y modificar nuestros procedimientos internos, implementando mayores controles y protocolos".
"También recurrimos a exigentes instancias internacionales para evaluar y certificar estos procesos", agrega la declaración.
Además, subraya, "nos autodenunciamos, colaboramos ampliamente con la investigación y esta semana traspasamos al Sernac los recursos para restituir los cobros indebidos a los consumidos", en alusión a los 7 mil pesos que se comenzarán a pagar desde el 1 de agosto próximo.
Todo lo anterior con el objetivo de "reconstruir las confianzas", y aunque el camino para ello "es largo, queremos recorrerlo por el bien de nuestros trabajadores, clientes y accionistas", manifestó la empresa.
