Las consecuencias de la crisis: Gasto familiar

Para el próximo año se prevé un escenario con una tasa de crecimiento en torno al 3,5 por ciento y una baja en la creación de empleos, por lo que realizar un buen manejo del gasto personal será fundamental para  sortear mejor las consecuencias de la crisis.

Durante el 2009 se espera una leve baja en los precios de los productos alimenticios, pero ninguna variación realmente drástica en estos valores.

El ex presidente del Banco Central Vittorio Corbo declaró en el Encuentro Nacional del Agro 2008 que si bien las perspectivas de precios han variado a raíz de la profundización de la crisis financiera y la caída en la demanda afectará sus valores durante los próximos meses, estos seguirán en  niveles aún son considerados altos.

Por otra parte, si bien las buenas noticias de las secuelas de la crisis se esperaba surgieran del descenso que se  prevé en la inflación para el próximo año, lo que respondería a una baja en los precios de los productos de la canasta básica, "esta es una buena noticia pero que se produce en un entorno de bajo crecimiento", advierte el economista Rafael Garay.

"Entonces, una inflación alrededor del 5,5 o seis por ciento con una economía creciendo menos de un tres no es un buen escenario general", añade.

En conversación con Cooperativa.cl, el académico de la Universidad Central señaló que el panorama con respecto a los combustibles tampoco se ve demasiado auspicioso, especialmente en el caso del petróleo, pese a que su precio disminuya en el extranjero.

"Si uno mira lo que son futuros sobre petróleo, el petróleo debería estabilizarse en torno a los 100, entre 95 y 105 dólares por barril, no debería ser más que eso", afirma, agregando que "también va a haber menos demanda internacional por petróleo, porque la economía mundial se va a contraer, pero es distinto el efecto que nos está pasando a nosotros, que nos está subiendo el litro de bencina por el  tema dólar"

"Por lo tanto, nos vamos a tener que acostumbrar a un precio de dólar más alto, a importaciones más caras y por ende, a un precio del combustible que, a pesar que baje en los mercados internacionales, el aumento del dólar acá va a hacer que  tengamos un litro de combustible caro", puntualiza el economista.

Considerando estas perspectivas para el próximo año, Garay explica que las medidas a tomar para enfrentar mejor la situación van en dos carriles: austeridad en el gasto y responsabilidad en el endeudamiento.

"En el corto plazo, hay que ser responsable, gastar menos y ordenar el presupuesto familiar en caso de que haya mucho endeudamiento (...) la recomendación para el próximo año es a reducir el endeudamiento, porque no va a ser un buen momento para estar altamente endeudado", subraya.

"Además, va a ser necesario ser responsables en los gastos y tratar de sustituir (...) o sea, si tenía planificadas unas tremendas vacaciones al extranjero y se iba a endeudar para eso, hoy con un dólar alto, es mejor elegir algo más austero o acortar la duración del viaje", precisa el académico.

"Sin duda, yo creo que vamos a llegar a fin de año muy cansados y nos merecemos vacaciones, pero eso no significa que sea razonable gastar de manera irresponsable y endeudarse innecesariamente".

Por otra parte, Garay indica que, en caso de estar en proceso de adquirir una vivienda, esta es la época para negociar el precio y así amortiguar el alza de la UF y "porque los precios están más bajos y esta compra  no es gasto, es un bien raíz, algo que después puedes liquidar. Esta es una de las oportunidades que la economía está dejando".