El ministro de Economía, Pablo Longueira, calificó como "esperable" el crecimiento de 4,8 por ciento de la actividad económica durante el tercer trimestre del año informado por el Banco Central.
Según el secretario de Estado, el dato está dentro de lo presupuestado, recalcando que el crecimiento de los últimos meses del año reflejará la desaceleración de la economía internacional.
"Esto de la desaceleración de la economía mundial está dentro de lo esperado y esperamos mantener con esta cifra un crecimiento lo más cercano al 6,5 por ciento este año", señaló el ministro.
Longueira añadió que estos resultados "nos obligan a seguir insistiendo a los chilenos, al país, que seamos responsables, cuidemos los que hemos avanzado. Es imposible que, a pesar de los esfuerzos que estamos haciendo por mantener el crecimiento y el empleo, mantengamos los ritmos actuales".
"Factores sicológicos"
Para el decano de la Facultad de Economía de la U. de Chile, Manuel Agosín, también hay factores sicológicos de los agentes económicos que están incidiendo en el moderado crecimiento de 4,8 por ciento registrado entre julio y septiembre.
"Yo creo que la autoridad está manejando bien esto, no veo ningún error de políticas grueso. Lo que yo creo que esto tiene un componente sicológico muy grande", afirmó Agosín.
"Para alguna desaceleración de las exportaciones, si uno ve producción industrial está bastante caída, hay factores reales, pero hay factores que son puramente sicológicos. La gente enfrentada a un escenario muy incierto lo que hace es irse a la liquidez y ahorrar más", enfatizó el economista.
En tanto, para el economista jefe del banco Penta, Matías Madrid, todavía no se ha notado en la actividad el impacto total que tendrá la crisis internacional.
"Estimamos que de aquí a fin de año el crecimiento del último trimestre debería estar en torno al 4,6 por ciento y para el 2012 ya empezar a ver el principal impacto de la crisis, que el crecimiento del PIB el próximo año debiera estar entre 4,0 y 4,5 por ciento", sostuvo Madrid.