En el marco del tradicional "caldillo de congrio con receta nerudiana" que ofrece a la prensa cada 1 de enero, el Partido Comunista (PC) abordó este lunes los desafíos del país para el 2024, dando énfasis a la importancia de lograr acuerdos en materia de pacto fiscal y reforma de pensiones.
Sobre este último punto, el líder de la colectividad, Lautaro Carmona, señaló que "es un deber ético" avanzar, y consideró una mala idea someter a consulta ciudadana la resolución de los aspectos en que el oficialismo y la oposición parecen no tener posibilidad de acuerdo, como el destino del nuevo 6 por ciento de cotización.
"Si yo instalara la idea de plebiscitar (la discordia) en este caso concreto, en la propuesta y donde va el debate previsional, le estaría regalando un tiempo a la derecha de la cual se blanquearía (su posición). No haría jamás eso, porque va en desmedro de la angustia que tienen los pensionados; ésta es una urgencia que no soporta un día más", afirmó Carmona.
En esta línea, el exdiputado afirmó que si la derecha insiste en "imaginar una reforma previsional (...) que sea eficaz y civilizada y que no cuenta con el espacio del pilar solidario, es ignorancia o intencionar un abuso ya sin nombre".
El timonel también abordó la crisis de seguridad que afronta el país y expresó "solidaridad y disposición a contribuir en todo lo que vaya en la dirección de hacer justicia con las familias de quienes han sido víctimas fatales del accionar del crimen organizado".
Este flagelo "está golpeando a nuestro mundo popular, a nuestras poblaciones, a nuestra gente, a nuestros niños y niñas", señaló Carmona, acompañado por la secretaria general del PC, Bárbara Figueroa, y otros dirigentes y parlamentarios.
DERECHA CUESTIONA DISPOSICIÓN DEL GOBIERNO AL DIÁLOGO
Desde la oposición, el jefe de la bancada de diputados de RN, Frank Sauerbaum, recriminó que "es lamentable que el Gobierno anuncie diálogo, conversaciones y entendimiento, y al otro día presente las indicaciones para el proyecto sin ninguna conversación previa".
Asimismo, reprochó la nueva fórmula 3-2-1 propuesta por La Moneda en torno al 6% de cotización adicional: "Hay una serie de cuestionamientos respecto de cómo se va a distribuir. Antes había dicho que estaba disponible para el 2% o 3% (a capitalización individual), y ahora resulta que los trabajadores se van a quedar sólo con el 1,7%".