La actriz Roseanne Barr, protagonista de la serie "Roseanne", aseguró este miércoles que el tuit racista contra una ex asesora del expresidente estadounidense, Barack Obama, lo escribió bajo los efectos de somníferos.
"Eran las dos de la mañana y era Ambien (una marca de somníferos) quien tuiteaba. Era el Día de los Caídos, además. Fui demasiado lejos y no quiero que me defiendan", tuiteó hoy la actriz, pese a anunciar ayer que abandonaría la red social.
Barr causó este martes una gran controversia al criticar a la afroamericana Valerie Jarrett, que fue asesora del ex presidente de EE.UU. Barack Obama, asegurando que ella era como si los Hermanos Musulmanes y la película "El planeta de los simios" hubieran tenido un hijo.
La cadena ABC canceló inmediatamente la serie, una de las que le reportaban mejor audiencia, y arguyó que las declaraciones de Roseanne eran "abominables, repugnantes e inconsistentes" con sus valores.
NO ES UN EFECTO SECUNDARIO
Ya que Barr hizo alusión a uno de sus medicamentos, el laboratorio Sanofi le respondió a la actriz en medio de la polémica.
Utilizando su cuenta en el mismo Twitter, la entidad sostuvo que "gente de todas las razas, religiones y nacionalidades trabajan en Sanofi todos los días, para mejorar las vidas de personas alrededor del mundo".
"Mientras todos los tratamientos farmacéuticos tienen consecuencias colaterales, el racismo no es un efecto secundario conocido de ninguno de los medicamentos de Sanofi", añadió la publicación.
DE MAL GUSTO
La actriz escribió otro tuit dirigiéndose a la ex asesora de Obama: "No sé si lo viste, pero quiero disculparme por haberte hecho daño y haberte enfadado con un tuit insensible y de mal gusto".
Barr, de 65 años, es una conocida defensora del actual presidente de EE.UU., Donald Trump.
El exmarido de Roseanne, el también actor Tom Arnold, bromeó en Twitter y dijo que él también había estado bajo los efectos de los somníferos entre 1990 y 1994, la época en la que habían estado casados.