En Chile, el mercado gastronómico ha venido creciendo exponencialmente después de la crisis del 2008, debido a diversos factores, entre ellos el aumento de la oferta. El tamaño actual del mercado de los servicios de comida en Chile es de US$2.445 millones.
Si bien Chile solo ocupa el sexto lugar dentro de los países en Latinoamérica con ciudadanos que más salen a comer, lo cual no es mucho, el interés en el servicio va en subida. Así lo plantea el análisis de la industria gastronómica de Santiago, realizado por Repositorio Universidad de Chile.
Actualmente, en nuestro país, salir a comer no es un lujo. El placer de disfrutar una delicia gourmet o solo un buen plato y ser bien atendido, más que un premio se está volviendo una costumbre. Es por esta razón que la oferta gastronómica se ve potenciada por la gran masa de gente que se interesa en ella.
Ya sea una junta de trabajo, una reunión entre amigos, el menú de la semana, una cena con la pareja, cualquiera sea el motivo, es pretexto para disfrutar de una buena comida.
Mayores exigencias
Para los dueños de locales es importante mantenerse vigentes debido a la fuerte competencia que existe y que sigue en desarrollo.
La exigencia del cliente está yendo cada vez más allá. No solo se fija en el plato que le sirven, sino también exige una buena atención, tiempos de espera razonables, amabilidad, buena presentación, etc.
Además de esto, cada vez es más exigida la "experiencia", es decir, música, decoración, ambiente, creatividad del lugar o el concepto del mismo.
Nuevos problemas, nuevas respuestas
Así, los insumos de los locatarios también deben ir creciendo en su perspectiva. Nuevos servicios se van haciendo cada vez más comunes y necesarios para mejorar la oferta y no quedar atrás. Partiendo desde lo más básico: el tiempo de espera en un restaurant es vital. Las demoras excesivas hacen perder clientes y arruinan el marketing viral.
En este punto crítico, surge una práctica solución tecnológica: el "sistema de llamada para meseros", el cual ayuda a conectar al anfitrión con el mesero y al mesero con el cliente y con la cocina. Así, los tiempos y rotación de cocina y atención se agilizan, dejando a los clientes más felices. Este sistema lo trae MMCALL Chile, empresa multinacional, que se enfoca en potenciar el mercado gastronómico en nuestro país.
Claramente el paladar, el gusto y las expectativas de los chilenos han evolucionado. Cada vez existen más "sibaritas" o "foodies" que se interesan y se hacen clientes habituales de los lugares que más satisfacen sus gustos, expectativas e intereses. Allí es donde radica la importancia de un excelente servicio y mirar el negocio desde un punto de vista más autocritico y enfocarlo más a la venta de una buena experiencia, que a la venta de ricos platos.