Osvaldo Bahamondes, académico de Ciencias Aeronáuticas de la Universidad Técnica Federico Santa María (USM), considera "raro" el percance en el asiento de la cabina que pudo haber provocado el accidente del vuelo LA800 de Latam Airlines.
El lunes, decenas de personas resultaron heridas cuando el Boeing 787-9 Dreamliner, que volaba de Sídney (Australia) a Auckland (Nueva Zelanda), sufrió problemas y experimentó una caída repentina.
De acuerdo con fuentes del diario estadounidense The Wall Street Journal, una azafata podría haber activado un interruptor en el asiento del capitán mientras servía comida a los pilotos.
Esto desencadenó una función motorizada automática que empujó el asiento del piloto, lo que provocó que éste presionara el control de mando, según explicaron investigadores estadounidenses basándose en la información preliminar recogida.
Esta función, que se utiliza para colocar el asiento en posición de almacenamiento, no está diseñada para ser utilizada con el piloto sentado en él; sin embargo, la indagatoria concluye que el capitán podría haber estado sentado con las piernas cruzadas sobre el asiento.
"El primer oficial podría haber tomado el control y nivelar, pero fue un evento de una -1 a -1,5 G (gravedad)", reveló una fuente a Cooperativa.
Además, Cooperativa tuvo acceso a un video que muestra cómo es el movimiento del asiento, que pese a parecer lento y controlable, no es tal considerando que el avión iba en pleno vuelo y con su oficial a cargo sentado con su cinturón.
Consultado al respecto, Bahamondes dijo a El Diario de Cooperativa que "el bastón de mando, si uno lo toca imprevistamente, desconecta el piloto automático, pero, de acuerdo a lo que yo he visto en la prensa, el problema fue que lo que se movió fue el asiento. Los asientos se mueven eléctricamente y este asiento, al moverse, aplastó al piloto contra ese bastón de mando".
"El bastón de mando, cuando uno lo empuja, el avión baja la nariz. Entonces, eso es más posible. Ahora, a mí me parece raro que un switch que tiene esa función sea factible accionarlo en vuelo y tan imprevistamente", comentó el profesor.
"Yo creo que ahí hay una falla y a lo mejor ese es el problema técnico del por qué pasó eso, pero es raro. Yo nunca había escuchado un accidente así ni un incidente así", acotó.
POSIBLES DETALLES DEL HECHO
El incidente también fue analizado por Darío Pérez, académico de la Ingeniería Eléctrica y experto en turbulencias y procesos estocásticos, óptica atmosférica y procesamiento de señales de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.
Según detalló el experto, "no está claro si fue el primer switch que está detrás del asiento o el que está al costado el que se presionó para mover el asiento, pero en cualquiera de las dos situaciones si el piloto tenía las piernas cruzadas y sin querer empujó la palanca de control, el hecho de tocar la palanca de control implica para los computadores del avión que el piloto automático se inhabilita y que es el piloto el que toma el control del avión".
"Entonces ante la ausencia de piloto automático la palanca hacia adelante implica que el avión tiene que bajar y va a bajar tan violentamente como violento es el empujar la palanca", puntualizó.
