La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que no ve "motivo alguno" para cambiar la política europea de su gobierno, tras la gran victoria electoral de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU), que quedó al borde de la mayoría absoluta.
"Nuestra política europea impulsa la integración y desde el punto de vista de la CDU no hay motivo alguno para cambiarla", dijo Merkel en su primera conferencia de prensa tras los comicios, al ser preguntada sobre la posibilidad de flexibilizar su apuesta por la austeridad.
Fueron varias las preguntas que tuvo que responder sobre su política en Bruselas y en todas subrayó su europeísmo y, al mismo tiempo, la necesidad de que los socios de la UE sigan el camino de las reformas que Alemania ya hizo en su día, un mensaje repetido en la campaña electoral.
"Alemania tiene experiencia" y lo que ha logrado pueden conseguirlo el resto de socios europeos, recalcó Merkel para recordar que el país fue "el enfermo de Europa" durante años, hasta poner en marcha las reformas que le han llevado a la estabilidad actual.
A su juicio, el claro apoyo recibido por los cristianodemócratas demuestra que los alemanes quieren que su Gobierno siga defendiendo sus intereses en Europa y en el mundo, pero que también apuestan por la unidad europea.
Europa "reforzada" tras la crisis
Convencida de que la UE puede salir "reforzada" de la crisis, Merkel precisó que objetivo de las reformas no es sólo el ahorro, sino que el continente incremente su competitividad y recupere la confianza de los inversores.
"Ya hemos logrado mucho, pero no hemos terminado", advirtió.
Ante quienes subrayan su poder en Bruselas, recordó que en el Consejo Europeo "Alemania es tan importante como Luxemburgo" y señaló que, quienes la conocen, saben que siempre busca el acuerdo.
Como ejemplo, recordó su decisión de no firmar en la cumbre del G20 celebrada en San Petersburgo una declaración sobre la crisis de Siria hasta no hablar con el resto de socios europeos, que se reunían al día siguiente.
"La política europea forma parte de nuestras señas de identidad", recalcó la líder cristianodemócrata, que destacó el caso de Irlanda como el de un país que ha hecho sus deberes y está saliendo de la crisis.