Buenos Aires sostuvo que -con la construcción de plantas de dos empresas europeas- Montevideo había violado el Estatuto del Río Uruguay, el que sirve de frontera común.
Argentina presentó hoy una demanda contra Uruguay ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya por la construcción de dos papeleras en territorio uruguayo que son objeto de una larga controversia entre ambos países.
Así lo confirmó el canciller argentino, Jorge Taiana, desde la ciudad de Puerto Iguazú, en el noreste del país, donde se celebra una reunión entre los presidentes de Argentina, Bolivia, Brasil y Venezuela.
En la presentación, el Gobierno argentino reclamó "una solución compatible con el ecosistema" a la polémica que mantiene desde hace más de un año con el de Uruguay por la instalación de las plantas de celulosa, indicó el jefe de la diplomacia argentina.
Precisó que Argentina denunció la "violación" del Estatuto del Río Uruguay, suscrito por ambos países en 1975, con el argumento de que la nación vecina autorizó unilateralmente la construcción de las papeleras de la firma española Ence y la finlandesa Botnia.
Las plantas se construyen en cercanías de la localidad uruguaya de Fray Bentos y sobre la costa del río Uruguay, hito fronterizo entre los dos países.
Además de pedir la "apertura de instancia" ante la Corte de La Haya, Buenos Aires solicitó una "medida cautelar" para que se paralicen las obras de construcción de las plantas hasta que exista un pronunciamiento del tribunal internacional.
La instalación de las papeleras derivó en un largo conflicto entre Argentina y Uruguay, que apoya una iniciativa que supone inversiones por 1.800 millones de dólares, las mayores que ha recibido ese país.
El Gobierno argentino y los habitantes de la provincia de Entre Ríos, limítrofe con territorio uruguayo, temen que las plantas contaminen la cuenca del río Uruguay, lo que es negado por las autoridades del país vecino y las empresas implicadas en el proyecto.
Argentina nunca había recurrido anteriormente a la Corte Internacional de La Haya, el principal órgano judicial de las Naciones Unidas, ante quien este jueves efectuó la presentación el embajador argentino en los Países Bajos, Santos Goñi Marenco.
La demanda fue presentada un día antes de que el presidente argentino, Néstor Kirchner, encabece un acto en defensa del medio ambiente al que acudirá la mayoría de los gobernadores del país en la ciudad de Gualeguaychú.
Los vecinos de esa localidad argentina han realizado sucesivos bloqueos del puente que conduce a la uruguaya de Fray Bentos en protesta por la instalación de las papeleras, el último de los cuales fue levantado el pasado martes.
"Hoy se presenta ante La Haya lo que técnicamente se denomina la apertura de la instancia, que es algo así como una suerte de reclamo inicial a partir del cual el tribunal interviene", explicó el jefe del Gabinete argentino de ministros, Alberto Fernández.
Agregó que "en poco tiempo más hay que presentar lo que se llama la memoria, que es donde hay más nivel de detalle sobre el reclamo argentino".
"Argentina ha fundado su reclamo básicamente en los incumplimientos al Estatuto del Río Uruguay, donde se plantea que cuando uno de los dos países realiza obras a orillas del río, el otro debe estar suficientemente notificado y tiene derecho a generar alguna oposición cuando siente que esto puede afectar los intereses de este otro país", indicó.
Tras sostener que "nada de eso ocurrió en este caso" y "por eso Argentina hace esta presentación", Fernández señaló que el acto de mañana en Gualeguaychú no fue organizado con el propósito de "tensar la cuerda" en la relación con Uruguay.
"El acto tiene un sentido concreto, que es que todo el mundo entienda que lo que Argentina está reclamando no es el reclamo caprichoso de un gobierno, sino que es el reclamo de toda una sociedad, de todo un país", remarcó. (EFE)
