La ex presidenta argentina Cristina Fernández se apresta a declarar ante la Justicia en medio de una causa que investiga millonarias pérdidas ocurridas en el Banco Central trasandino durante el tramo final de su segundo mandato.
Tras pasar cuatro meses alejada de la escena política en la Provincia de Santa Cruz, en el sur del país, Fernández volvió anoche a Buenos Aires, y fue recibida en el Aeroparque Jorge Newbery -con banderas y cánticos- por cientos de militantes kirchneristas.
La ex mandataria había sido despedida de manera similar en la ciudad de El Calafate y, en paralelo, agrupaciones kirchneristas se reunieron frente al domicilio que la ex mandataria tiene en el barrio porteño de la Recoleta.
La "Señora K" declarará mañana miércoles ante el juez federal Claudio Bonadío, quien investiga la celebración de contratos futuros de dólar por los que el Banco Central habría pactado vender dólares a un precio que rondaba los 10,65 pesos por unidad, por debajo del precio establecido en la Bolsa de Nueva York que, por ese entonces, se situaba alrededor de los 14 pesos.
Según el magistrado, de la diferencia entre el precio pactado y el del mercado, el Banco Central registró, entre septiembre y diciembre de 2015, una pérdida de 1.552 millones de pesos" argentinos (equivalentes a más de 70 mil millones de pesos chilenos).
Por ventas posteriores celebradas para el periodo comprendido entre enero y junio de 2016, "se registró un saldo negativo de 27.724 millones de pesos" (1,2 billones de pesos chilenos).
De cara a la diligencia judicial de mañana la militancia kirchnerista convocó una marcha de apoyo a la ex mandataria que se dirigirá las puertas de los Tribunales de Justicia.
Cabe recordar que, recientemente, la ex jefa de Estado también quedó involucrada en una causa que indaga una presunta red de lavado de dinero, por la que el fiscal federal Guillermo Marijuán pidió formalmente que fuera investigada.
En tanto, el ex ministro de Economía de Fernández, Axel Kicillof, declaró este martes tras salir de tribunales que "lo que se ha tratado de insinuar, la llamada causa dólar futuro, no es un negociado ni una causa de corrupción".
"Las 1.000 páginas del expediente no contienen ninguna denuncia sobre un eventual beneficio a algún funcionario, empresario u otra persona vinculada a la anterior gestión", añadió el ex secretario de Estado.
