El ex contador de Cristina Fernández, Víctor Manzanares, que se encuentra en prisión en la causa Hotesur, que investiga lavado de dinero en el Hotel Alto Calafate, de propiedad de la familia Kirchner, admitió que borró actas con "liquid paper" por solicitud de la ex mandataria argentina.
Manzanares, quien asumió la contabilidad de los Kirchner en 1976 y fue desvinculado por la familia hace apenas un mes, aseguró que nada "fue con un fin malicioso".
"Me considero una persona con arraigo a mi tierra, puntualmente a Río Gallegos. La provincia de Santa Cruz me dio todo y jamás la defraudaría", afirmó Manzanares ante el juez Julián Ercolini y el fiscal Gerardo Pollicita, según la declaración a la que tuvo acceso el diario Clarín, de Argentina.
"La documentación que obraba en mi poder la retiró un apoderado de ellos, a raíz de esa desvinculación. Kirchner había sido abogado de mi padre en algunas de sus firmas vinculadas con el rubro automotor. Desde los 14 años conozco a la familia Kirchner", añadió el contador.
De acuerdo con Clarín, la legislación que rige a las sociedades comerciales en Argentina prohíbe enmendar, tachar o alterar las actas y los libros societarios, lo que sucedió en este caso.
En el acta en cuestión data del 26 de marzo de 2014, fecha en que se eligió un nuevo directorio de Alto Calafate y en ella se borró el nombre de Cristina Fernández y se reemplazó por el de su hijo Máximo Kirchner.
