El Banco Central de la República Argentina (BCRA) anunció este jueves una nueva subida de la tasa de interés de referencia, del 78 al 81 por ciento, en medio de la escalada que en los últimos días viene dándose en la cotización informal del dólar y del escenario de altísima inflación que arrastra el país.
En concreto, el directorio de la autoridad monetaria decidió elevar en 300 puntos básicos la tasa de política monetaria, por lo que la tasa de interés nominal anual de las Letras de Liquidez (Leliq) a 28 días, consideradas el instrumento de referencia, se ubica ahora en el 81 por ciento.
"Simultáneamente y en pos de mantener el incentivo al ahorro en pesos, el BCRA elevó los límites mínimos de las tasas de interés sobre los plazos fijos de personas humanas, llevándolos a un rendimiento de 81 por ciento nominal anual para el caso de los depósitos de hasta 10 millones de pesos y de 72,5 por ciento nominal anual para el resto de los plazos fijos", agregó el BCRA en el comunicado.
INFLACIÓN Y MERCADO DEL DÓLAR INFORMAL
Una decisión que contribuye a "mantener la consistencia" con el nivel de las tasas de interés de corto plazo de los instrumentos de deuda del Tesoro Nacional.
En marzo, Argentina registró una inflación mensual del 7,7 por ciento y del 104,3 por ciento interanual, 1,8 puntos porcentuales más que la que se anotó en febrero y récord en los últimos 32 años.
"El BCRA continuará monitoreando la evolución del nivel general de precios, la dinámica del mercado de cambios y de los agregados monetarios a los efectos de calibrar su política de tasas", concluye el texto difundido.
Al problema de la inflación se suma el de la constante devaluación del peso -agravada en los últimos días- en el mercado del dólar informal, conocido como 'blue', que se vende en el mercado negro y que es el que en la práctica sirve de referencia para la economía de los ciudadanos por las fuertes trabas que, para frenar la fuga de divisas, se mantienen para acceder al dólar en el mercado oficial.
Un frágil escenario económico lastrado, además, por la caída de las exportaciones agropecuarias -principal fuente de dólares- por la sequía que arrastra el país y por la incertidumbre que genera la cercanía de las elecciones presidenciales.