Un nuevo accidente de tren, que provocó al menos 80 heridos en una de las más concurridas estaciones de Buenos Aires, reavivó la polémica sobre el estado del transporte en Argentina y las críticas contra el Gobierno de Cristina Fernández, en la recta final de la campaña electoral.
Ocho de los heridos se encuentran ingresados en observación, pero sus vidas no corren peligro, aseguró a los medios el jefe del departamento de Urgencias del hospital Ramos Mejía, Alejandro Muñoz.
El accidente ocurrió a primera hora de la mañana, cuando una formación del ferrocarril Sarmiento, procedente de las afueras de la capital, chocó contra el paragolpes de un andén de la estación de Once y avanzó varios metros sobre él, sembrando el pánico entre la multitud.
En la misma línea y en el mismo andén, otro accidente provocó 51 muertos y más de 700 heridos en febrero de 2012, en una de las mayores tragedias ferroviarias de la historia argentina.
"Vi que llegaba el tren, que no frenaba y entonces escuché una explosión muy fuerte y muchos gritos", relató a la prensa uno de los testigos del accidente, quien aseguró que no podía creer que se hubiera producido "otra catástrofe".
Julio, uno de los pasajeros, agradeció haber sufrido solo golpes, pero denunció que "no se puede viajar más así".
Maquinista habría ido a gran velocidad
En rueda de prensa, el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, transmitió la solidaridad del Gobierno con los heridos y sus familiares y pidió tiempo para que la justicia pueda esclarecer las causas del accidente.
Según los datos del GPS difundidos por Randazzo, el tren no registró ningún inconveniente durante todo el recorrido, pero entró en el andén a una velocidad superior a la media.
Una de las pruebas clave para la investigación, el disco duro con la grabación de la cámara de seguridad en la cabina del conductor,se la llevó el maquinista, pero la Policía la recuperó y está analizando su contenido, confirmó el ministro de Transporte.
El maquinista, que fue agredido e insultado por testigos y pasajeros justo después del siniestro, está detenido por orden judicial en un hospital porteño.
Fernández no está informada
La presidenta argentina "no está informada" del accidente, afirmó Randazzo, debido al reposo estricto que guarda tras la neurocirugía a la que fue sometida el pasado 8 de octubre, que la ha obligado a ausentarse de la escena política.
A sólo ocho días de los comicios legislativos, la oposición argentina salió hoy domingo a exigir la dimisión de Randazzo y denunciar el estado deficitario del servicio ferroviario.
"Randazzo y (el ministro argentino de Planificación Federal, Julio) De Vido deben renunciar. Han demostrado ser al menos ineficaces para mejorar el sistema y responsables del desmanejo de subsidios", dijo a través de Twitter la candidata a diputada Margarita Stolbizer.
"Estupor e indignación ¿Hasta cuándo?", se cuestionó en la misma red social el también candidato opositor Francisco de Narváez.
"Otra mentira del kirchnerismo"
El postulante a diputado de la coalición UNEN Fernando Solanas subrayó que "la nacionalización y la mejora de los trenes es otra mentira del kirchnerismo" y acusó a Randazzo de haberse limitado "a maquillar trenes con pintura nueva y plasma" en vez de realizar una mejora profunda del servicio.
Tras la tragedia de febrero de 2012, el Gobierno argentino nacionalizó la gestión de este medio de transporte que usan a diario 2,7 millones de personas para desplazarse entre Buenos Aires y su poblada área metropolitana.
El titular de la cartera de Transporte subrayó que "nada ni nadie va a torcer" su voluntad política para "seguir transformando" el sistema ferroviario, hoy nuevamente cuestionado.
La línea Sarmiento ha sufrido tres accidentes graves en poco más de 20 meses, que en total han costado la vida a 54 personas y han causado 973 heridos.